La Secretaría de Marina (Semar) descartó que el helicóptero tipo Black Hawk, que cayó en el municipio de Los Mochis, Sinaloa, tras la captura de Rafael Caro Quintero, exlíder del Cártel de Guadalajara, fuera derribado.
Informó el contralmirante en entrevista a Grupo Milenio, agregando que la detención del narcotraficante fue resultado de una operación de dos meses.
Al mismo tiempo confirmó que en el helicóptero viajaban elementos que participaron directamente en la captura del capo, sin embargo su caída no fue porque fuera derribado.
“Estamos determinando si fue un error humano o una falla mecánica, pero no fue derribado el helicóptero (…) desafortunadamente sí fueron parte del grupo que intervino en el aseguramiento. Algunos de ellos fueron los que aseguraron directamente al blanco, otros en perimetral, pero todos fueron parte de ese equipo que participó en el aseguramiento”.
Relató que en la captura también participó personal de las áreas de inteligencia y de operaciones especiales.
Sobre las versiones que afirmaban que en la detención participaron elementos de la DEA, el contralmirante al igual que el presidente Andrés Manuel López Obrador y el embajador Ken Salazar, confirmó que la Armada de México tiene acuerdos de intercambio de información con diversas instancias de inteligencia de Estados Unidos y de otros países, sin embargo, “no hay evidencia de que en la operación haya habido, ni participación directa ni intercambio de operación (de la DEA)” y “no hay evidencia de ello”.
Marina detiene a Rafael Quintero
Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, y buscado por la DEA desde 1985 por el asesinato de su agente Enrique “Kiki” Camarena, fue detenido este viernes por la Secretaría de Marina en un operativo especial.
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Su detención ocurrió en Chihuahua y responde a una orden de captura que desde el pasado 9 de mayo lanzó la DEA, incluso por información que llevara a su captura ofrecían una recompensa de 20 millones de dólares.
Caro Quintero fue detenido desde 1985 y liberado en 2013 tras lograr un amparo del Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito en Jalisco firmado por la magistrada Rosalía Moreno, Lucio Lira Martínez y José Félix Dávalos, quienes consideraron que Caro Quintero debió ser juzgado en el fuero local por el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena y no en el federal, como sucedió.
