A medida que la oferta de gas en Europa se ralentiza y la demanda aumenta el bloque europeo se adentra a una posible recesión económica.
Mientras el gasoducto ruso Nord Stream continúa en mantenimiento, en Europa se elevan las alertas ante el posible cierre total del suministro de gas natural procedente de Rusia por tiempo indefinido, escenario que aumenta la preocupación a medida que el invierno se acerca.
Ante esto, Moscú puede frenar las entregas del energético a los países europeos alegando fallas técnicas en la operación de sus rutas de abastecimiento, sacando provecho de sus recursos energéticos para posicionar una superioridad geopolítica a medida que el conflicto en Ucrania escala.
Frente a este escenario, la Directora gerente del Fondo Monetario Internacion (FMI), Kristalina Georgieva, advirtió que la interrupción de la oferta de gas natural agudizada por la guerra en Ucrania empujará al bloque europeo a una recesión económica.
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Georgieva anunció que la perspectiva económica del mundo continúa siendo extremadamente incierta por lo cual se han recortado la previsiones de creciéndome mundial para 2022 y 2023.
«Los indicadores recientes implican un segundo trimestre débil y proyectaremos una nueva rebaja del crecimiento global para 2022 y 2023 en nuestra Actualización de Perspectivas de la economía mundial a finales de este mes», indicó la institución encargada de la estabilidad monetaria internacional.
Tan solo la semana pasada la titular del fondo señaló que reduciría el panorama de crecimiento por tercera ocasión en este año, asimismo señaló que los nuevos resultados serán presentados a finales de julio.
Georgieva ya había advertido con antelación los riesgos a los que se enfrentaba la economía mundial en 2022 y 2023, «Desde entonces, varios de esos riesgos se han materializado y las múltiples crisis que enfrenta el mundo se han intensificado», señaló a los Ministros de Finanzas y banqueros centrales reunidos esta semana en Indonesia en la cumbre del G20.
«Los países deben hacer todo lo que esté a su alcance para reducir la inflación (…) porque una inflación persistentemente alta podría hundir la recuperación y dañar aún más los niveles de vida, en particular para los vulnerables», comentó Georgieva.
«Va a ser un 2022 duro, y posiblemente un 2023 aún más duro, con un mayor riesgo de recesión»
Kristalina Georgieva, Directora gerente del Fondo Monetario Internacional.
La exdirectora del Banco Mundial (BM) y ahora Directora gerente del FMI precisó que el proceso inflacionario próximo a desatarse debe ser abordado por los países inteligentemente, «La mayoría de los bancos centrales tendrán que seguir endureciendo la política monetaria de manera decisiva» y advirtió que de no ser así los países podrían «enfrentar una espiral destructiva de salarios y precios«.
Además calificó como necesario «una contracción monetaria más contundente» y brindó el apoyo de la institución internacional «ofreciendo análisis y asesoramiento individualizado, y un marco de concesión de préstamos«.
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JOVC
