Fotografía: Jamie Street / Unsplash
Los mercados de capitales iniciaron la semana con fuertes pérdidas a nivel global, con lo cual extendieron las que se presentaron en las últimas dos sesiones de la semana pasada. El mercado se muestra pesimista tras la decisión de la Fed de subir la tasa de interés en 50 puntos base el pasado miércoles. Los inversionistas especulan que la Fed no podrá reducir y mantener la inflación dentro de su rango objetivo sin provocar una recesión.
Las presiones inflacionarias no se han disipado como se esperaba y la continuación de la guerra entre Ucrania y Rusia, así como la suspensión de actividades en China ante el aumento de casos de COVID-19, han generado mayores disrupciones en las cadenas de suministro, lo cual representa un riesgo importante para la inflación. Esto ha sembrado la duda en el mercado de que la Fed se verá en la necesidad de adoptar una estrategia más agresiva en la normalización de su política monetaria.
Algunos analistas especulan respecto a la posibilidad de que el banco central decida aumentar la tasa de interés en 75 puntos base en alguna de sus próximas reuniones, a pesar de que en la semana pasada Jerome Powell hizo énfasis en que esa opción no estaba siendo considerada. Por el momento, la tasa de interés implícita no contempla aumentos de 75 puntos base en las reuniones restantes del año.
A causa de este escenario, el índice S&P 500 registró una pérdida de –3.20% en la sesión, mientras que el NASDAQ Composite cayó –4.29%. Esta jornada marcó la tercera consecutiva de pérdidas para el S&P 500 y el NASDAQ, en las que acumulan caídas de –7.18% y –10.35%, respectivamente. Con el desempeño de hoy, el S&P 500 cerró por debajo de los 4,000 puntos por primera vez desde el 31 de marzo del 2021, con lo cual borra las ganancias de los últimos 13 meses. Por su parte, el NASDAQ cerró por debajo de los 12,000 puntos, en niveles no vistos desde noviembre del 2020.
Con estos resultados, en lo que va del 2022 el S&P 500 muestra un rendimiento negativo de –16.26%, mientras que el NASDAQ cae –25.71%. Cabe destacar que, respecto a su máximo histórico, el S&P 500 muestra una caída de –17.17%, de modo que si llegara a caer un –3.6% adicional entrará a territorio “bear market”.
Al interior del S&P 500, 10 de los 11 sectores industriales registraron pérdidas, siendo el de consumo básico la única excepción con una ganancia de 0.05% en la sesión. Las mayores pérdidas se dieron en los sectores de energía (–8.30%), bienes raíces (–4.62%), consumo discrecional (–4.26%) y tecnologías de información (–3.94%). A nivel emisora destacó una caída de –1.40% en el precio de la acción de Amazon, con la que acumula una disminución de –31.16% en lo que va del 2022.
En el mercado europeo también se observaron pérdidas: el DAX de Alemania cayó –2.15% y el FTSE 100 del Reino Unido, –2.32%. Con este resultado, el FTSE 100 dejó de tener un rendimiento positivo en 2022 y pasa a registrar una pérdida de –2.27% en el año. Respecto al mercado de valores europeo en agregado, el índice Stoxx Europe 600 registró una pérdida de– 2.90%, su peor caída diaria desde el 4 de marzo de este año.
Respecto al mercado mexicano, el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores (S&P/BMV IPC) cerró la sesión con una pérdida de –0.98% y acumula una caída de –4.62% en las últimas tres sesiones. Al interior del índice, 22 de sus 35 emisoras registraron pérdidas, destacando Volaris (–7.98%), Grupo Aeroportuario del Pacífico (–4.76%), Cemex (–4.47%), Megacable (–3.34%), Operadora de Sites (–3.27%), Grupo México (–3.25%).
Con el resultado de hoy, el IPC registra un rendimiento en el año de –7.91% y respecto a su máximo histórico muestra un rezago de –14.03%.
En la semana, el mercado estará atento a los comentarios por parte de los miembros de la Fed, así como a la publicación de las cifras de inflación de Estados Unidos el miércoles por la mañana, para la cual se espera una tasa de inflación general interanual de 8.3% y de 6.0% para la subyacente (“core”), de acuerdo con la encuesta realizada por Bloomberg.
En el mercado de divisas el peso cerró la sesión con una depreciación de –1.22% (24.6 centavos), y cotizó alrededor de 20.37 pesos por dólar; el tipo de cambio tocó un mínimo de 20.1550 y un máximo de 20.3920 pesos.
En la canasta amplia de principales cruces, el peso mexicano fue la octava divisa más depreciada, por detrás el rublo ruso (–2.71%), la corona noruega (–1.96%), el dólar australiano (–1.74%), el real brasileño (–1.47%), el rand sudafricano (–1.36%), la corona sueca (–1.35%) y el dólar neozelandés (–1.28%).
Con información de Grupo Financiero Base
Te puede interesar: La inflación continúa su camino a la estratósfera
