La zona arqueológica de Palenque se considera como un tesoro nacional, donde podrás descubrir los impresionantes templos y palacios mayas. Contempla las esculturas que datan de alrededor de los años 500 a 800 D.C.
Palenque es uno de los destinos turísticos ideales para aquellas personas con gusto en la naturaleza, las actividades al aire libre, pero sobre todo en la arqueología. La zona fue fundada en el año de 1567 por fray Pedro Lorenzo en el corazón de la Selva Lacandona,misma que se encuentra ubicada al norte del estado de Chiapas.
Primero, es importante mencionar que el Palenque fue declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como Patrimonio de la Humanidad, junto con Tikal y Calakmul. Ahora bien la zona cuenta con diversas actividades para asombrarte y pasar un da lleno de diversión. Puedes contratar un tour o una visita guiada para conocer a fondo sombre las estructuras más importante como el Templo de las Inscripciones, la Gran Plaza, una explanada rodeada de algunas de los basamentos más importantes como el Palacio, el Templo el Conde, el Templo del Sol y el Templo de la Cruz Foliada, entre otros. Destaca también el famoso Acueducto, una obra de ingeniería maya que se complementa con un puente de piedra conocido como Baño de la Reina. También sobresalen las plataformas paralelas utilizadas para el juego de pelota.
En la naturaleza, el Parque Nacional Palenque encontrarás una zona arqueológica de aproximadamente mil 772 hectáreas y alberga distintas especies de fauna como jaguares, monos, aulladores, ardillas grises, cacomixtles, entres otros. De aquí que también puede adentrarte a la Selva Lacandona muy cerca del sitio arqueológico, podrás encontrar dos de las últimas comunidades Lacandona: Nahá y Metzabok, espacios que cuentan con cabañas de hospedaje y recorridos guiados por la selva.
Para admirar el entorno de la región, la iglesia de Santo Domingo de Guzmán es la ideal, desde arriba podrás observar todo lo que la rodea. Además es importante mencionar que es el patrono del pueblo. Sin embargo, si quieres conocer los verdaderos orígenes del lugar el Museo Alberto Ruz Lhuillier es el lugar indicado para descubrir los vestigios descubiertos en la zona por el arqueólogo de origen francés, uno de los principales investigadores de Palenque y quien entre 1949 y 1952 halló la tumba del gran gobernante maya.
Si tu objetivo es refrescarte, debrás escaparte a la cascada Welib Há, ubicada en el centro ecoturístico a 35 kilómetros del Pueblo Mágico. Así como las cascadas de Misol Há, cuya caída de más de 30 metros forma una alberca natural donde puedes nadar.
Además, para deleitar el paladar se encuentran una variedad en gastronomía como los platillo de shote con momo, un caldo de caracol de río con hoja santa, menta y pimienta. El pato chirmol, elaborado con pepita y tortilla quemada. El salpicón que elaboran con carne de venado, los tamales de chipilín o bien para los paladares con gustos dulces encontrarán los plátanos fritos rellenos de queso, los dulces de miel de abeja, ates, tostadas de coco o las empanadas de queso y de leche, así como la bebida clásica llamada balché.
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