El índice de precios del consumidor subió un 9.1 por ciento respecto al año anterior y se refleja en los costos de gasolina, vivienda y alimentos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden intentó restar importancia a un reporte que mostraba una inflación superior a la esperada en junio, calificándolo de «desactualizado» debido a la caída de los precios de la gasolina en Estados Unidos.
Biden calificó la inflación de inaceptablemente alta en un comunicado, pero dijo que los datos de hoy no reflejan el impacto total de casi 30 días de descensos en los precios de la gasolina que desde mediados de junio, han reducido el precio en las estaciones de servicio en unos 40 centavos.
En el comunicado, emitido una hora después del reporte del Departamento del Trabajo sobre los precios al consumidor, el mandatario estadounidense comentó que los ahorros están dando un respiro importante a las familias estadounidenses.
Debemos recordar que el índice de precios al consumidor en Estados Unidos subió un 9.1 por ciento respecto del año anterior, según datos publicados este miércoles por el Departamento del Trabajo, el mayor aumento que los consumidores han visto desde finales de 1981.
El indicador de inflación ampliamente seguido aumentó 1.3 por ciento respecto al mes anterior, la mayor cantidad desde 2005, lo que refleja mayores costos de gasolina, vivienda y alimentos.
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EARR
