Fotografía: John Cameron / Unsplash
El planteamiento por parte del gobierno de Estados Unidos de levantar un embargo en torno al petróleo producido por Rusia como una nueva medida para asfixiar su economía, provocó que los precios del crudo alcanzaran niveles no vistos en 14 años.
Durante el transcurso de la noche a la manaña del día de ayer, el WTI llegó a un máximo de 130.50 dólares por barril, algo no visto desde el 22 de julio del 2008, mientras que la mezcla Brent alcanzó un preció de 139.13 dólares, situación que no tenía lugar desde el 16 de julio del 2008.
Aunque no se trata de una decisión tomada, han circulado las especies que la administración Biden habría entrado en contacto con los gobiernos de Venezuela y Araba Saudí, pues en principio los aliados europeos de Estados Unidos no podrían sumarse al embargo por las implicaciones que ello tendría para su propia economía.
De hecho, el canciller alemán Olaf Scholz mencionó que el país no puede detener las importaciones de energía rusa de la noche a la mañana, ya que están acelerando sus planes para ampliar el uso de fuentes de energía alternativas. Por otro lado, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, mencionó que la Unión Europea está discutiendo cómo acelerar la inversión en energías renovables y diversificar el suministro energético. Como consecuencia de lo anterior, se redujeron las ganancias del petróleo.
Al mismo tiempo, el viceprimer ministro ruso Alexander Novak advirtió que los precios del petróleo podrían superar los 300 dólares por barril si Estados Unidos y la Unión Europea llegasen a prohibir las importaciones de crudo desde Rusia, de acuerdo con un cable de la agencia Reuters.
“Está absolutamente claro que el rechazo del petróleo ruso tendría consecuencias catastróficas para el mercado global”, señaló Novak a través de un video que fue transmitido por la televisión estatal. “El aumento de los precios sería impredecible. Serían 300 dólares por barril, si no más”.
Ya durante la sesión, el crudo WTI concluyó con una cotización de 119.93 dólares por barril, lo que implicó un aumento de 3.67%, mientras que el Brent aumentó su precio 4.61% para llegar 123.55 dólares por barril.
Al igual que el resto de los commodities, el precio de los energéticos ha sido presionado al alza por las preocupaciones que existen en torno a los suministros, toda vez que la invasión de Rusia ha ocasionado problemas en las cadenas de estos. Es importante recordar que los bancos han reducido su exposición a los proveedores de materias primas rusas, al tiempo que los transportistas decidieron abandonar las rutas que parten desde y se dirigen a Rusia.
Con información de Grupo Financiero Base
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