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El comportamiento del peso se mantiene inestable en tanto al alza que registró ayer sobrevino una baja hoy, esta vez de 0.49% o 10.1 centavos, con lo cual su cotización cerró en torno a 20.58 pesos por dólar, con un registro mínimo de 20.3512 y un máximo de 20.5876 pesos por dólar.
Durante la sesión, el tipo de cambio manifestó un comportamiento volátil luego de la publicación de varios indicadores económicos y una serie de comentarios sobre la política monetaria en Estados Unidos y el anuncio de política monetaria del Banco de México. A pesar de la volatilidad, al cierre de la sesión prevaleció un fortalecimiento del dólar estadounidense y un movimiento al alza para el tipo de cambio.
El índice ponderado del dólar, en el mercado cambiario, cerró con un incremento de 0.16%. Ello se debió a que en Estados Unidos la inflación de enero se ubicó en una tasa anual de 7.5%, con lo cual superó las expectativas del mercado que estaban cifradas en 7.3% y de pasó registró su mayor nivel en 40 años, el cual tuvo lugar en febrero de 1982.
Asimismo, también durante enero se incrementaron las presiones inflacionarias dentro del componente no subyacente, luego de que en diciembre registraron cierta estabilidad. Lo anterior implica un mayor riesgo al alza para la inflación y genera especulaciones en torno a que la Reserva Federal podría abandonar sus estímulos monetarios de forma más agresiva.
Por otro lado, el presidente de la reserva regional de St.Louis, James Bullard, declaró públicamente que le gustaría que la tasa de interés muestre un incremento de 100 puntos base a inicios de julio. Debido a que hay tres decisiones de política monetaria programadas entre el día de hoy y el primero de julio (16 de marzo, 4 de mayo y 15 de junio), sus comentarios implican un respaldo franco a un incremento de 50 puntos base en alguno de los próximos anuncios de política monetaria, y se contempla que el primero tenga lugar en el mes de marzo. En este sentido las especulaciones apuntan a que el primer incremento a la tasa de interés será de 50 puntos base, ello pese a que varios oficiales de la Fed han señalado que es importante que los ajustes a la tasa de interés sean de forma gradual.
En México, el banco central anunció un incremento de la tasa de interés objetivo en 50 puntos base para situarse en 6.00%, lo cual estaba previsto, por lo que el tipo de cambio se mantuvo estable tras el comunicado. Se hizo énfasis en que la Junta de Gobierno considera que los riesgos para la inflación se mantienen sesgados al alza y se realizó un ajuste de las expectativas de inflación.
El Banco de México estima que la inflación anual promedio de los cuatro trimestres de 2022 será de al menos 4%, es decir, proyecta que todo el año el índice se ubicará por arriba del intervalo de variación alrededor del objetivo de 3%, que va del 2 al 4%. Esto eleva la probabilidad de que Banco de México continúe elevando su tasa de interés, aunque a partir del siguiente anuncio, programado para el 24 de marzo, se espera que la Junta de Gobierno tome en consideración los ajustes a la tasa de interés de la Reserva Federal, pues será importante evitar un relajamiento de la postura monetaria relativa frente a Estados Unidos.
Con información de Grupo Financiero Base
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