Un estudio publicado por Estados Unidos reveló que la vacuna Janssen resulta ser menos efectiva ante la variante Delta y otras mutaciones que el virus original.
El informe fue presentado por un equipo de la Universidad de Nueva York y se realizó mediante el análisis de muestras de sangre en un laboratorio.
Las conclusiones del estudio señalan que las condiciones reales podrían ser distintas, por ello, los autores destacaron la importancia de que los vacunados con la monodosis Janssen podrían requerir un refuerzo de vacunas con ARN mensajero como Pfizer y Moderna.
«sugiere el beneficio de una segunda inmunización (….) para aumentar la protección contra las variantes»
Este análisis resulta contradictorio al informe compartido por J&J este julio, donde detallan que la vacuna resulta muy efectiva contra la variante Delta inclusivo varios meses después de haberse administrado.
Vacunas y su eficacia
De acuerdo con una publicación israelí, la efectividad de la vacuna Pfizer/BioNTech es del 94% para evitar un contagio asintomático y 92% para evitar el impacto severo de la enfermedad. Mientras que el biológico AstraZeneca alcanza el 82.4% de efectividad.
Especialistas británicos publicaron un estudio explicando que una dosis Pfizer/BioNTech mostró ser 74% efectiva tras 14 días de su aplicación y AstraZeneca fue 80 por ciento efectiva en la prevención de hospitalizaciones en pacientes mayores a 80 años.
CoronaVac, producido por laboratorios Sinovac, en China, tiene eficacia que inhibe la gravedad y la muerte del 100%; además evita la enfermedad moderada con un alcance del 77.96% y previene el contagio hasta un 50.4%.
Sinopharm llegó al 61.6% de protección con una sola dosis, al aplicar ambas vacunas, la inmunización aumentó hasta el 84%. Por su parte, Moderna, previene el virus en un 95%.
Cansino y Sputnik V, con niveles de protección de 60% y 91.4% respectivamente, se aplican en diversos países, sin embargo, ninguna de las dos tiene la validación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
