La industria de los cruceros ha recibido un nuevo golpe. El nuevo caso de COVID 19 detectado en el Crucero Royal Caribbean que zarpó de Singapur para un tour de cuatro días donde no tocaría ningún puerto, debió regresar antes de lo previsto con los pasajeros aislados en sus camarotes.
El mes pasado se puso en marcha un programa piloto para reactivar su industria de cruceros con unas medidas muy estrictas de seguridad y una capacidad máxima de 50 % de pasajeros.
Este programa de “Crucero a ninguna parte” contempla la salida de 3 o 4 días, sin visitar otro puerto y regresando al mismo lugar de salida.
Los 1400 pasajeros deben llevar en todo momento un dispositivo electrónico de seguimiento de contactos y respetar la sana distancia en todo momento.
Se suspendieron los buffets de autoservicio y se mejoraron las instalaciones médicas de prueba y aislamiento.
Estos viajes están limitados solo a Singapurenses o residentes del país. El pasajero infectado es un hombre de 84 años que presentó diarrea. El hecho de haberlo detectado a tiempo es una prueba de que el sistema de prevención funciona.
Aún está lejos la recuperación de este sector. Se trata de activar los viajes de estos majestuosos barcos que fueron los primeros en sufrir el problema de la pandemia. Con los “Viajes a ninguna parte” pero desgraciadamente terminó siendo un viaje literalmente a ninguna parte.
Existió otro caso en un viaje a Barbados. El SeaDream salió del puerto el 7 de noviembre de 2020 en Barbados para un crucero de 7 días, la primera salida de las Indias Occidentales desde el embargo de Covid-19.
Regresó temprano debido a un brote de Covid-19 a bordo. El barco transportaba a 66 tripulantes y más de 50 pasajeros, con la mayoría de los pasajeros de Estados Unidos.
Durante los primeros 2 días del crucero, no se requirió que los pasajeros y la tripulación usarán máscaras. Una falta grave a los protocolos internacionales donde se pide usar a toda hora el cubrebocas o mascarilla. Después un pasajero dio positivo, los funcionarios de salud de Barbados abordaron el barco y examinaron a los pasajeros, confirmando que 9 personas dieron positivo por Covid-19 y fueron enviadas a Harrison ‘s Point con una persona evacuada médicamente. Los pasajeros restantes, que dieron negativo en las pruebas, regresaron a sus hogares utilizando aerolíneas comerciales.
Carnival, Royal Caribbean y Norwegian comprenden casi el 80 por ciento de la industria de cruceros. Donde millones de viajeros gastan su tiempo de vacaciones y su dinero a bordo de una de las tres grandes líneas de cruceros cada año.
No se ve la luz al final del túnel para los cruceros. La industria trata de poner en marcha iniciativas como estas que también se han implementado en las líneas aéreas con “Viajes a ninguna parte”.
Afortunadamente las líneas aéreas no han tenido ningún pasajero infectado, hasta ahora, lo que indica que viajar en avión puede ser más seguro que viajar en un crucero.
