La crisis actual cumplirá en febrero un año asentada en México y, a lo largo de este tiempo, la cultura se ha dañado de manera paulatina; de forma particular el teatro, que es uno de los pilares fundamentales de este sector en el país y hoy sus compañías luchan por sobrevivir, aunque esta supervivencia la han padecido incluso desde antes.

Y es que, al reflexionar sobre el teatro en México es inevitable regresar siempre a la opinión de un hacedor y difusor de teatro: Luis de Tavira. El cofundador del Centro Universitario de Teatro de la UNAM considera que el éste es un derecho para los mexicanos y una necesidad del espíritu.

Pero, antes que nada, era necesito preguntarle, ¿qué es el teatro?, a lo que en alguna de muchas entrevistas que me ha dado respondió: “El teatro es el espejo de lo que somos, es el constructor de la conciencia e identidad nacional, por eso es grave que los mexicanos no tengan acceso a éste, porque una sociedad sin teatro no tiene verdad.”

Con los ojos fijos en mí rostro mientras se concentraba en sus meticulosas palabras y la mirada alzada, que producía un ceño fruncido involuntario, De Tavira me hizo saber que el apoyo al teatro y el gusto por el mismo no tiene que recaer necesariamente en promotores culturales, dramaturgos o compañías, es también un trabajo de la sociedad.

“El gobierno debe ser la raíz de la promoción, pero si el público se muestra pasivo, entonces no sucede nada, porque debe existir un reclamo de la sociedad, por eso el público que viene y descubre el teatro, con su furor y su sorpresa, debiera reclamarlo y entender que es un derecho social”.

Por eso para el también ensayista, es vital la formación de públicos capaces de apreciar, “porque el teatro pertenece a la dimensión de lo cualitativo, donde la aspiración a la calidad es lo que hace tomar conciencia de que somos personas y que la vida podría ser tan intensa”, explicó con la fluidez del maestro que domina la materia.

En este mismo orden de ideas, arriba al tema de la inclusión o lo que es igual, al teatro para todos: “la cultura es patrimonio de todos y el teatro público se produce con la riqueza nacional. Es la riqueza nacional la que hace posible a la cultura, el problema es que está muy mal distribuida, entonces el fruto de la cultura tiene que ser repartido y deja sin ese derecho a grandes sectores”.

Hace mucho que De Tavira considera que el mundo entero vive una intensa lucha entre la civilidad y la barbarie, el tema de la pandemia no es indiferente, por lo que la cultura para él siempre ha sido el camino viable y eficaz para reafirmar la civilidad del pueblo y sus derechos.

Particularmente en un momento como el que atraviesa México consideré importante traer a colación a Luis de Tavira, quien desde siempre ha considerado necesario “crear conciencia y articular los reclamos desde la sociedad, para que no se vuelva factor de esa mercadotecnia electoral, que es la que importa a ciertos políticos y con ello contribuya a una transformación real del país”.