Últimamente las personas en España han tenido miedo de ponerse la vacuna contra la Covid-19. La inmunización iba viento en popa desde el pasado 27 de diciembre, pero a raíz de los casos de trombosis en Europa tras ponerse la vacuna de Oxford/AstraZeneca, la población pone en duda su aplicación.

Y es que en verdad no ayuda la falta de coordinación que hay en la Unión Europea. En Inglaterra se ha vacunado a la gente sin irregularidades. Solo tras los casos de trombosis se ha excluido a menores de 30 años.

Por su parte, Bélgica, Francia o Alemania, no dejaron de vacunar a mayores. Luego, a medida que hubo nuevos estudios con personas de más edad, cambiaron de opinión.

España tardó más, después de varios casos, puso en duda si era adecuado ponerla a los jóvenes ante el riesgo de trombos. Sin embargo, los casos son pocos, alrededor de 300 en todo Europa, contra los más de 30 millones de dosis aplicadas. Nos dicen que son daños colaterales.

El problema en España es que primero nos informan de las muertes y de los posibles efectos secundarios y luego nos dicen que nos tocará la AstraZeneca si o si, una de cada tres personas no ha asistido a su cita en su centro de salud para aplicarse la vacuna. Primero nos informaron que tenía un 79% de eficacia contra el 90% de Pfizer y el 94% de Moderna, ahora nos dicen que es del 70%, así como no vamos a preferir las otras marcas de vacunas, si hay más efectividad y hasta el momento los efectos secundarios han sido los esperados.

De entre las características de la vacuna AstraZeneca es que es la más económica, la que mejor disponibilidad dio y, por lo tanto, se compraron miles de dosis, tras la polémica, se ha decidido que aun así conviene aplicar la vacuna e inmunizar a la población, que hay que tener confianza, ya que todas las vacunas e incluso los medicamentos cotidianos, nos pueden causar cientos de efectos secundarios e incluso la muerte.

Ahora, después de la vacuna de AstraZeneca, viene la esperada Janssen de los laboratorios de Johnson&Johson, pero en los Países Bajos se encuentran 80 mil dosis, a la espera de una recomendación de la Agencia Europea del Medicamento, sobre su seguridad y su posible relación con seis casos de coagulación sanguínea inusual en Estados Unidos.

De la vacuna rusa Sputnik V con una eficacia del 97%, no se habla, ni se le espera pronto, está en proceso de revisión por parte de la Unión Europea.

Y para más inri, los casos de trombos se dan en mujeres de entre 25 y 65 años, y tras ponerse la vacuna, sufren de coagulación ya sea cerebral o estomacal, posible efecto adverso. Aun así, es mejor ponerse la vacuna y así poco a poco llegar a la normalidad y poder abrazar a nuestros familiares y amigos. Hay que valerse del dicho: “Cuando te toca, aunque te quites; cuando no te toca, aunque te pongas” Pues voy a ponerme.