Después de aprobarse la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, mejor conocida como la Ley Mordaza, en España en Julio de 2015, por el entonces presidente Mariano Rajoy, ha habido deseos de derogarla, pero ni las promesas de campaña del Partido Socialista Obrero Español, ni dos anticipos electorales, ni una legislatura frustrada, ni la pandemia, han podido con ella.
A ésta ley se le ha criticado por activa y por pasiva desde diferentes sectores de la sociedad y de la política, por vulnerar los derechos fundamentales, por trasgredir los derechos humanos y la libertad de expresión y eso en una democracia como la que presume España, no se puede permitir.
Además, considero que si se aplica ésta ley, debe ser igual para todos, sin excepción y no sólo para lo que convenga. Y quiero dar un ejemplo. Hace unos días metieron a la cárcel a un rapero llamado Pablo Hasél por agredir a la corona española y por enaltecer al terrorismo, además de cargos anteriores y reincidencia, si ha cometido agravios, pues, algunas consecuencias tendrá, pero, estas consecuencias deben de ser igual para todos.
Lo anterior lo digo porque el día 13 de febrero se autorizó una manifestación antisemita, en homenaje a la División Azul (la unidad militar enviada por Franco a Rusia en apoyo de Hitler) de ultraderecha y católica, pues bien, los simpatizantes de las derechas, lo llamaron “libertad de expresión” Y cito tal cual salió en un vídeo difundido por la web La Marea donde “se ve a una joven ataviada con la camisa azul falangista que suelta una proclama en la que asegura: “El enemigo siempre va a ser el mismo aunque con distintas máscaras: el judío”. Y añade: “Porque nada más certero que esta afirmación: el judío es el culpable y la División Azul luchó por ello. El comunismo es una invención judía para enfrentar a los obreros””. Siendo católicos me sorprende que no sepan que Jesucristo era judío.
Esto desató la ira de la comunidad Judía en Madrid por semejantes declaraciones y obviamente lo denunciarán ante los jueces, pero, ¿también recibirán más dos años de prisión? Porque la ley es igual para todos y si uno llama ladrón a Juan Carlos de Borbón o enaltece al terrorismo, o a la señora Cristina Cifuentes después de mentir sobre su máster, se le critique por haber salido indemne, lo otro es igual de grave, además de culpar a todo un sector de la sociedad en España que siempre ha convivido en armonía.
Los medios audiovisuales apenas y han mencionado los hechos de ésta marcha antisemita, sin embargo, toda la violencia callejera que ha desatado el encarcelamiento de Hasél en toda España, ha llenado horas y horas de tertulias en radio y televisión, además de los litros de tinta para los medios escritos. ¡O todos coludos o todos rabones!
¡Bendita democracia española!