Cada 24 de junio en el calendario católico se indica la celebración del apóstol San Juan Bautista, quien fue hijo de Isabel, prima de la Virgen María y quien también acompañó muy de cerca los pasos de Jesucristo. Sin embargo su origen no inició en el cristianismo, pues el origen comenzó con los paganos hace más de 2,000 años, pues se dice que en el principio los hombres guiaban sus vidas por el sol.
Los pueblos de la antigüedad veneraban la naturaleza y sus elementos, así como las estrellas en el cielo, las cosechas, el cambio de las estaciones, sus rituales honraban a los espíritus para conseguir su favor.
Además, se dieron cuenta de que había un momento en el que el astro perdía su fuerza y otros días se hacían más cortos, pero por temor a quedar en plena oscuridad comenzaron a realizar rituales y las celebraciones en la época en la que el astro rey volvía a brillar con fuerza, por lo que desde ese momento fue el principio a la celebración del Día y Noche de San Juan.
El antes y después de la celebración de San Juan
Durante el periodo de los paganos, usaban dos elementos básicos como el fuego y el sol, por lo que encendían hogueras con el objetivo de dar fuerza y así seguir iluminando el resto del año, a la vez que pedían a los dioses un futuro próspero para los enamorados.
Tiempo después, el cristianismo lo involucró por el apóstol San Juan Bautista, pues se dice que Zacarías mandó encender una hoguera para anunciar a sus parientes el nacimiento de su hijo, Juan Bautista, que fue el encargado de preparar a la humanidad para la llegada de Jesús.
¿San Juan es significado de lluvias?
En el tiempo de la Colonia en México, se comenzó a festejar el Día de San Juan; sin embargo, había un fenómeno climatológico singular porque casi cada 24 de junio llovía, dicha festividad se juntaba con las celebraciones prehispánicas dedicadas a los dioses. En este caso, la festividad que se empalmaba era el festejo al dios de la lluvia, Tláloc, la cual se realizaba entre los meses de junio y septiembre, cuando se presentan lluvias, por ello, la asociación de que cada Día de San Juan llueve.
¿Cómo se festeja?
Las fiestas de San Juan, que se celebran la madrugada del 23 al 24 de junio, son famosas, plenas de magia y encanto, noche de tambores y baile, el santo es dueño del espacio, de sus fieles y del alma de la fiesta. Asimismo, en varios de los estados de México retomaron las fiestas y ferias patronales para celebrar a San Juan Bautista, así como a quienes lleven el nombre de pila de Juan o Juana.
Además, se utilizan fogatas y fuegos artificiales para purificar le alma y desechar los demonios, así como quemar libros como símbolo de un inicio en la etapa del solsticio de verano.
De los rituales
Es importante recalcar que en este día también se tiene la creencia de varios rituales que si se realizan en este día cada uno puede dar un significado, entre ellos se encuentra:
Cortarse el cabello: La tradición marca que si deseas que tu cabello crezca, recupere su brillo y luzca sedoso, pueden ser solo las puntas o el largo que así se desea.
Mojarse con agua de lluvia: Se dice que ese día el agua está bendecida por San Juan Bautista, por lo que mojarse el cabello ayudará a conservarlo hermoso y saludable. En el caso del rostro, se sugiere lavarse con la lluvia para lucir siempre joven o por lo menos atenuar las líneas de expresión.
Sumergirse al mar para la salud: Para mantener o recuperar la salud del cuerpo se sugiere sumergirse al mar, pero para quienes no viven en un sitio de playa, pueden hacerlo sumergiéndose a una alberca o una tina. Ya en caso extremo, dejarse empapar bajo la lluvia.
Revelación en sueños: Si una duda tienen, flores blancas deberás poner bajo tu almohada para que la respuesta sea revelada durante los sueños.
Pedir un deseo: Se dice que para conseguir que un deseo se cumpla, plantes una hortensia de color blanca o morada en una maceta y se ofrezca a San Juan, si florece significa que tu deseo se cumplirá.
Te puede interesar: ¿Corpus Christi o Día de las Mulitas? Este es el origen
MAO
