En la organización de la Consulta del Presupuesto Participativo 2022, es fundamental tomar en cuenta a los habitantes de todas las alcaldías, pues son ellos quienes conocen las verdaderas necesidades de sus comunidades y, por lo tanto, los que deben definir los proyectos a ejecutarse, destinando así de forma correcta los recursos, planteó la diputada Xóchitl Bravo Espinosa.
La presidenta de la Comisión de Participación Ciudadana del Congreso de la Ciudad de México advirtió que, de no hacerlo de esa manera, los capitalinos dejarán de confiar en las instituciones y sus representantes vecinales, lo que echaría por la borda los avances logrados en los 10 años de ejecución de los presupuestos participativos.
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“Es importante que la opinión de la gente sea tomada en consideración, ya que son los propios habitantes los conocedores de los proyectos que verdaderamente hacen falta en sus colonias, barrios o pueblos originarios. Eso permitirá ahorrar muchos inconvenientes durante la aplicación de los recursos en todas las demarcaciones territoriales”, enfatizó.
En el marco de una reunión virtual de trabajo con el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) sobre la organización y desarrollo de la Consulta del Presupuesto Participativo 2022, Bravo Espinosa resaltó la trascendencia de conocer los puntos de vista de los integrantes de las Comisiones de Participación Comunitaria, conocidas como COPACOS.
Ante la consejera presidenta del IECM, Patricia Avendaño Durán; consejeros electorales y titulares de las áreas ejecutivas y técnicas del IECM, la legisladora local propuso formar mesas de trabajo específicas en aquellas alcaldías donde existen barrios y pueblos originarios.
“Es necesario crear mesas interinstitucionales para tratar cada uno de los temas que propongan los habitantes de los barrios y pueblos originarios, porque además sus necesidades deberán acoplarse a la ley que existe para ellos”, subrayó.
La también Vicecoordinadora de la Asociación Parlamentaria Mujeres Demócratas (APMD) aseveró que dentro de la gran pluralidad que existe en la Ciudad de México, se debe tomar en cuenta a los vecinos de las unidades habitacionales, porque plantean proyectos muy definidos debido a las características de convivencia en éstas.
Asimismo, la diputada Xóchitl Bravo Espinosa calificó como una prioridad conocer la opinión de la Procuraduría Social (PROSOC), para que los proyectos ciudadanos no se dupliquen y los recursos sean bien canalizados a las necesidades reales de los vecinos.
Por su parte, la consejera presidenta del IECM, Patricia Avendaño, aseveró que los proyectos que realizados con el presupuesto participativo han beneficiado a miles de familias y transformado de forma positiva los entornos comunitarios.
“Dichos proyectos han impactado significativamente y con ello la creación de ciudadanía. Esto es resultado de la recuperación de los espacios públicos; de contar ahora con espacios de convivencia, deportivos, culturales y artísticos. Se han mejorado las condiciones de vida de miles y miles de personas”, puntualizó.
En ese contexto, expresó que el IECM es un eslabón en la organización de las consultas sobre el presupuesto participativo, toda vez que junto con los ciudadanos de las 16 alcaldías y el Congreso de la Ciudad de México se definen los recursos que se ejercerán en dicho rubro.
A su vez, el consejero presidente de la Comisión de Participación Ciudadana y Capacitación del IECM, César Ernesto Ramos Mega, planteó diversas propuestas de colaboración con el Congreso capitalino acerca de la organización de la Consulta del Presupuesto Participativo para este año.
“Una de éstas es trabajar de manera conjunta en la difusión de la convocatoria del presupuesto participativo, con la finalidad de involucrar más a la ciudadanía y que tenga mayor conocimiento de este tipo de recursos. Se trata de dar una buena señal a los vecinos e invitarlos a participar”, recalcó.
