La joven madre fue víctima de un familiar, quien la quemó viva afuera de su tienda ubicada en la colonia El Hospital, de Cuautla.
Margarita Seceña fue quemada viva por sus familiares, por lo que la Fiscalía de Cuautla giro cuatro órdenes de aprehensión contra María de la Cruz “N”, Nataly “N”, Leobardo “N” y Primitivo “N” por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa.
Las órdenes de aprehensión surgieron dada la denuncia de Andrea «N», madre de la víctima. Asimismo se solicitó la intervención de la Procuraduría de la Defensa de las Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia para la atención de psicológica de las víctimas colaterales del caso, los hijos de Margarita.
“Los agresores que son familiares de la víctima se acercaron a ella, momento en que un masculino identificado como Primitivo “N” habría rociado gasolina a ella y a un menor de 14 años de edad prendiéndole fuego a la mujer, lo que le ocasionó lesiones por quemadura en el 80 por ciento de la superficie corporal”, expuso la Fiscalía en un comunicado.
Durante la mañana del 26 de julio, familiares y amigos de Margarita Ceceña se congregaron en una vivienda de la comunidad de San Isidro Atlautenco, Ecatepec, en el Estado de México, donde decidieron darle el último adiós.
Margarita fue asesinada el pasado primero de julio, pues familiares le rociaron gasolina y le prendieron fuego provocándole quemaduras de tercer grado, por lo que estuvo internada durante 24 días en el Hospital General de Cuautla, sin embargo, no lograron estabilizarla y fue trasladada al Instituto Nacional de Rehabilitación en la Ciudad de México, donde finalmente perdió la vida.
La joven de 30 años era madre de tres menores, fue agredida en su negocio en la zona de la Ex-Hacienda del Hospital en Cuautla, Morelos.
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Asimismo, comentaron omisión por parte de las autoridades para atender el caso a tiempo, pues anteriormente Margarita se acercó a la Fiscalía de Cuautla para denunciar violencia y a pesar de que ella acudió con golpes, rasguños y sangre, las autoridades decidieron no proceder.
«Es lo que yo pido, que ya empiecen a buscar a los asesinos porque ahora sí son asesinos».
Andrea Martínez, madre de Margarita
El primero de julio, Primitivo, concuño de margarita, llegó acompañado de su esposa y su suegra (prima y tía de la víctima) a la tienda, ubicada en la calle Vicente Suárez, de la comunidad de El Hospital. En las manos llevaban machetes y una garrafa que resultó contener gasolina.
Primitivo vació el combustible sobre la joven y el negocio, para después prenderle fuego.
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