Desde falta de mantenimiento hasta una mala estructura en su construcción, los pasos elevados de Acapulco se han convertido en una trampa mortal, en donde miles de conductores tanto particulares como del servicio público se han visto afectados.
De acuerdo a datos de las propias autoridades del gobierno, el municipio de Acapulco cuenta con diez puentes elevados, los cuales fueron construidos originalmente con el fin de mejorar la situación de vialidad y dar una imagen urbana al puerto turístico, sin embargo, en la actualidad, los puentes se han convertido en sinónimo de peligro, pues se encuentran en condiciones deplorables.
Entre los desperfectos estructurales que se han detectado en los elevados se encuentran la falta de tubos de protección, desgaste de concreto, varillas descubiertas que han provocado ponchaduras de llantas de los vehículos, así como fisuras en las columnas y en las trabes de cajón con aletas, mejor conocidas como “ballenas”.
Entre los puentes que presentan un mayor desgaste, se encuentra el ubicado en bulevar Vicente Guerrero, construido para el proyecto Acabus, el cual presenta desgaste del concreto y varillas descubiertas; mientras que el ubicado en la Vía Rápida, no cuenta con la mayoría de la tubería a las orillas del mismo que sirven como medida de seguridad para los conductores.
Otra de las vialidades elevadas que requieren supervisión, es el denominado Bicentenario, ubicado en la Avenida Cuauhtémoc, el cual desde su inauguración en noviembre 2010 no ha recibido mantenimiento en su estructura.
Uno de los pasos que ha tenido eventos desafortunados, es el que se encuentra en la Avenida Escénica, el cual ha registrado accidentes automovilísticos con finales lamentables, como el ocurrido en abril 2018, en donde una pipa de Pemex chocó contra un vehículo particular, dejando a la conductora prensada entre los fierros de la unidad.
El ingeniero Joel Rosas Castillo, expresidente del colegio de Ingenieros del estado de Guerrero, ha declarado que los pasos elevados de Acapulco requieren de una inversión económica millonaria urgente para su rehabilitación o de lo contrario se podría sufrir en algún momento de un siniestro como el ocurrido en la Ciudad de México.
Pues desde el desplome de la línea 12 de la Ciudad de México el 3 de mayo del 2020, las autoridades del ayuntamiento y del Estado de Guerrero de la pasada administración, han realizado revisiones en los puentes del bulevar Vicente Guerrero y en la glorieta de Puerto Marqués, en donde se determinaron daños menores, sin embargo, no se ha concretado la rehabilitación de las vialidades.
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GCR
