Pablo Gómez, titular de la UIF, expuso el tema de la reforma electoral durante la plenaria de Morena, en donde aseguró que no se trata de un proyecto de ajuste de cuentas
Durante su presentación en la plenaria de Morena, Pablo Gómez, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), señaló que la reforma electoral no tiene que ver con “ajuste de cuentas”.
“Es un proyecto de parteaguas; no es un proyecto de ajuste, mucho menos un proyecto de ajuste de cuentas, muchísimo menos con personas que ya ni siquiera van a tener que ver con el proceso electoral federal próximo”, sostuvo.
Asimismo, resaltó que para aprobar la reforma en materia electoral no se requiere del consenso de todos los partidos como ocurrió en el pasado.
“La primera reforma que dicen que inició la transición a la democracia, era una diseñada por Reyes Heroles, no fue producto de un consenso; que fuera producto de un consenso con la oposición, tenía que eliminarse el control del gobierno sobre el proceso electoral, cosa que no se hizo”, comentó.
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Gómez Álvarez reclamó a la oposición que su postura es incongruente, pues aseguró que “nunca hicieron ellos lo que nos exigen hacer hoy a nosotros, no tienen autoridad para hacerlo. Y están inventando que las cosas así fueron”.
Pablo Gómez señaló al consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, al recordar que no estuvo presente en ninguna reforma, y resaltó que el problema con los sueldos de estos funcionarios es un tema de criterio.
“En el INE hay más de 300 personas que ganan más que el presidente. Sí tenemos un problema de sueldos con ellos, pero no es por el dinero, es por el criterio, por la idea de que no debemos tener burocracias doradas”, sostuvo Pablo Gómez.
El titular de la UIF, Pablo Gómez, fue invitado a la plenaria Morena, para exponer sobre las principales condiciones, así como su relevancia, que tiene la reforma electoral enviada al Congreso de la Unión por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no así para dar a conocer el trabajo que realiza en la dependencia que dirige.
Un hecho que no pasó desapercibido en su presentación fue cuando la diputada María Clemente le regaló un látigo para que no permita delitos entre las filas morenistas, y sea quien sea se le castigue como corresponde.
