Las ventas y utilidad de Carso Energy se elevaron en los primeros meses de 2021 debido a la renta de transporte de gas natural a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo que significa mayor ganancia y un desempeño positivo para la división de energía del Grupo Carso, empresa del multimillonario mexicano Carlos Slim.
Las ventas de la subsidiaria alcanzaron los mil 436 millones de pesos, entre el periodo de enero a junio de este año, lo que resultó en un incremento del 250 por ciento con relación al mismo periodo de 2020, cuando obtuvieron solamente 408 millones.
En tanto, su utilidad aumentó 44.5 por ciento, ya que la cantidad neta fue de 972 millones de pesos, en cuanto al flujo operativo (Ebitda), incrementó 32 por ciento, en comparación a lapso anterior.
Con base en sus resultados financieros, el grupo reconoció la prestación de servicios de transporte de gas a la CFE del gasoducto Sásabe-Samalayuc, disponible desde febrero de 2021, como parte fundamental de sus ingresos adicionales.
Cabe destacar que, Carso Energy tiene participación de 100 por ciento en el gasoducto mencionado, construcción que concluyó en 2020.
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A pesar de que existen otros gasoductos como Waha-Presidio y Waha-San Elizario en Texas que prestan servicios a la empresa energética del Estado, pues solo mantiene una participación de 51 por ciento, ingresos que no se reflejan atribuibles a la CFE, ya que se registran como ventas no consolidables.
El empresario mexicano se ha mantenido muy cercano al Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que fue de los primeros en establecer acuerdos, sobre todo relacionados con las tarifas de transporte de gas natural.
En 2019, el director general de la CFE, Manuel Bartlett, inició las negociaciones con privados sobre las tarifas de transporte del hidrocarburo, sin embargo, la situación se puso tensa por la construcción de gasoductos y la controversia en los costos del servicio de transporte.
López Obrador aseguró en su momento que la problemática pudo llegar a tribunales internacionales, aunque, reconoció a Carlos Slim por ser el primero en alcanzar un acuerdo con la empresa del Estado.
Por otra parte, la división energética de Grupo Carso, Carso Energy inició a reportar ingresos en 2017, ganancias que no solo se atribuyen a las rentas del transporte en los gasoductos de CFE, también, se consideran la producción y venta de petróleo de su empresa Tabasco Oil Company en Colombia.
Dentro del negocio petrolero, la empresa de Slim mantiene en proceso los permisos y desarrollo de los planes de exploración para los bloques 12 y 13 en la Cuenca Salina del Istmo, adjudicados en 2017 en la ronda 2.3 de licitaciones de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Y no solo en México mantiene su interés por entrar a sector energético, pues Carso Energy compró en 2020 100 por ciento de las acciones de Ideal de Panamá, que actualmente opera dos hidroeléctricas.
Muchos proyectos reflejan la ambición del millonario, que está en constante búsqueda de crecimiento en distintos tipos de negocios, aunque, se espera que la cercanía con el mandatario nacional también refleje resultados para el país y no solo para el empresario, que sabe de oportunidades mediadas por el Estado.
