Los talibanes tratan de borrar a la mujer de la sociedad hasta en los más mínimos detalles. Por ello, el relator especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los derechos humanos en Afganistán, Richard Bennett expresó su preocupación ante las restricciones impuestas ante las mujeres afganas.
Asimismo, el Gobierno talibán calificó este 27 de mayo de «infundada» la preocupación de la ONU por el retroceso de los derechos de las mujeres, como es el caso de la imposición del burka, y reafirmó su compromiso en garantizar sus libertades «dentro del marco religioso y cultural aceptado por los afganos».
“Los talibanes no aceptan a las mujeres como seres humanos y se comportan como si ya no existiéramos”, expresó una mujer afectada.
Desde su regresó al poder en agosto, los talibanes suman restricciones a los derechos de las mujeres, con el fin de someter su visión fundamentalista de Islam. Asimismo, han sido excluidas en los sectores como en lo laboral, social y actualmente en lo educativo.
En este sentido, fue a inicios de mayo, cuando el líder supremo de los talibanes emitió una orden para que las mujeres se cubrieran completamente en público, incluido el rostro, idealmente con burka, que tiene una rejilla de tela sobre los ojos que permite a la mujer ver pero no ser vista.
Por su parte, Bennett aseveró que todas las medidas describen un modelo de segregación total de género y pretenden que las mujeres sean invisibles en la sociedad.
Es importante mencionar, que durante la conferencia de prensa, talibanes armados disolvieron una manifestación de mujeres que exigían que las niñas pudiesen volver a la escuela. La organizadora de la manifestación, Munisa Mubariz aseguró que fueron aproximadamente mujeres y niñas quienes se encontraban en la protesta, cuando talibanes llegaron con armas y comenzaron a disparar.
La comunidad internacional ha hecho del respeto a los derechos humanos, especialmente de las mujeres, un requisito previo en las negociaciones sobre la ayuda y el reconocimiento del régimen islamista.
Sin embargo, el portavoz talibán Samangani agregó que «nadie» en Afganistán se opone a que las niñas y las mujeres reciban una educación.
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MAO
