Un dron norcoreano habría cruzado la zona de exclusión aérea en la proximidades de la Casa Azul, así lo denunció el Ejército de Corea del Sur. Además, es importante mencionar que la semana pasada se penetraron cinco vehículos no tripulados en el espacio aéreo surcoreano.
¿De donde vienen las señales de violencia?
El incidente se remonta al 26 de diciembre, cuando cinco drones norcoreanos penetraron en el espacio aéreo de Corea del Sur, que desplegó aviones de caza para tratar infructuosamente de abatirlos. Un funcionario explicó que las investigaciones demostraron que el dron ingresó en una zona de exclusión aérea de 3.7 kilómetros de radio alrededor de la oficina de Yoon Suk Yeol, a pesar de la primer versión del Estado Mayor Conjunto que había negado que hubiese habido un ingreso en el espacio aéreo.
«Voló brevemente hacia el borde norte de la zona, pero no se acercó a las instalaciones de seguridad clave», declaró el funcionario, bajo condición de anonimato, a la agencia de noticias Yonhap.
El ejército surcoreano ya se había disculpado por no haber podido interceptarlos, pero desmintió repetidamente que los aparatos se hubieran infiltrado en la zona restringida P-73, donde se encuentra la sede de la presidencia y del Ministerio de Defensa.
«No es verdad que (el dron norcoreano) no pasara sobre (el distrito de) Yongsan», zona se ubican estos dos edificios oficiales, reconoció el jueves Lee Sung-jun, portavoz del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
Ante esto, Seúl denunció que varios drones norcoreanos atravesaron la frontera, por lo que desplegó aviones y helicópteros para proceder a su derribo, en el que fue el primer incidente de este tipo desde 2017. Fuentes del Ejército surcoreano resaltaron de objetos no identificados, los cuales, provocaron la suspensión temporal de vuelos civiles durante las operaciones militares para derribarlos.
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MAO
