Las marchas y manifestaciones para el 8 de marzo en Madrid, España, quedaron prohibidas, luego de que jueces confirmaran la prohibición acordada por la Delegación del Gobierno por el «alto riesgo» de contagio.
A un día de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, en el que miles de mujeres aprovechan para protestar en favor de sus derechos, y de acuerdo a lo informado, los jueces españoles determinaron como prioridad el derecho a la salud y a la vida frente al de reunión.
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Para el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, esas manifestaciones suponen «un grave riesgo para la salud pública y para las personas, tanto para los propios manifestantes como para otras personas que pudieran tener accidentalmente contacto con ellos».
Organizaciones feminista y sindicales intentaron buscar las condiciones para que no se decretara la prohibición, sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia determinó que en las convocatorias a la manifestación no ofrecen medidas de seguridad para garantizar la salud, a través de la sana distancia o medidas que eviten que personas se retiren la mascarilla para expresarse en voz alta.
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