The Wall Street Journal informó que el Departamento de Justicia de Estados Unidos está en planes de demandar a Texas por la Ley que prohíbe los abortos en el estado, a excepción de los incestos o violación.
Actualmente, el Gobierno del Presidente estadounidense, Joe Biden, ha recibido las solicitudes por parte de grupos feministas y demócratas, esto para que el Departamento de Justicia frene las medidas impuestas.
El pasado 1 de septiembre entró en vigor la nueva Ley de Texas que prohíbe el aborto a las seis semanas de gestación, pese a que muchas mujeres no conocen de su situación aún.
Aunque no contempla casos de violación o incestos, permite que los particulares presenten demandas civiles contra cualquier personas que apoye en un aborto, así mismo se ofrece indemnizaciones de hasta 10 mil dólares al demandante en caso de ganar el juicio.
Merrick Garland, Fiscal General de Estados Unidos, mencionó que se esta buscando las opciones para responder a la Ley de Texas con la finalidad de “proteger los derechos constitucionales de las mujeres y otras personas, incluido el aborto”.
Afirmó que se planea aplicar la ley federal de 1994, la cual protege el libre acceso a las clínicas que practiquen abortos, y castiga a los que causen daños materiales de forma intencionada.
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Ante esta situación, expertos refirieron que en caso de que el Departamento de Justicia decida hacer algo, podría restringir los fondos federales a Texas.
