El Consejo de Salud de Estonia, Europa, informó que la semana pasada se destruyeron más de 68 mil vacunas contra Covid de la farmacéutica AstraZeneca debido a una falla en el refrigerador que aumentó la temperatura hasta 15°C.
El sistema de alarma no reportó la falla, por lo que esta se prolongó durante más de 12 horas. Fue hasta que un empleado del lugar ingresó a la sala fría que se percataron del inconveniente.
Además de las vacunas AstraZeneca, las cuáles deben permanecer entre 2 y 8 grados centígrados, también se destruyeron alrededor de 32 mil biológicos de otras farmacéuticas.
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La radio pública de Estonia detalló que las vacunas, ahora inservibles, estaban destinadas a donaciones fuera del país, por lo que el plan de vacunación no se verá afectado.
Denys Shymhal, primer ministro de Ucrania, declaró el pasado 17 de junio que Estonia enviaría alrededor de 200 mil vacunas para apoyar la inoculación de los ucranianos.
Hasta este martes, Estonia ha aplicado al menos una dosis a poco más del 50% de la población adulta, ubicándose por debajo del promedio europeo que ronda el 58.7%.
