Irmgard Furchner con 97 años fue considerada como cómplice de las muertes de más de 10 mil 500 presos hacinados en el campo de concentración de Stuffhof, esto por parte de un tribunal alemán.
Por ello, la Audiencia Provincial de Itzehoe aprobó la petición de la Fiscalía de dos años de libertad condicional para la mujer, sine embargo, su defensa había solicitado la absolución.
En este sentido, es importante mencionar que el campo de Stutthof fue el lugar donde tanto polacos, soviéticos y judíos procedentes de diferentes países, por lo que más tarde murieron más de 60 mil personas por inyecciones letales, fusilamientos, frío o inanición.
Ahora, tras un total de 40 días de juicio, el juez condenó a la acusada Irmgard Furchner, de 97 años, por complicidad en asesinato en más de 10 mil 505 casos, así como por complicidad en tentativa de asesinato en otros cinco.
Ante la investigación, en unos 14 meses, los expedientes del juicio se engrosaron hasta alcanzar unas tres mil 600 páginas, a las que se suman una memoria USB con unos dos mil actas de interrogatorio. Así como 14 testigos quienes prestaron declaraciones, de los cuales ocho de ellos son supervivientes del campo de concentración de Stutthof.
Sobre el Juicio
El juicio, inició el 19 de octubre de 2021, para marzo y abril la sesión quedó interrumpida por enfermedad de la acusada y tanto los supervivientes como su abogados temían que la nonagenaria no regresara al tribunal, pero siguió su preso tras recuperarse, por lo que se retomó el 26 de abril.
La acusada trabajó entre junio de 1943 y abril de 1945, de los 18 a los 19 años, en calidad de empleada civil como taquígrafa y mecanógrafa de la comandancia en el campo nazi de Stutthof, cerca de Gdansk, en Polonia.
Debido a su entonces juventud, la fiscal exigió una sentencia en base a la ley que regula la responsabilidad penal de los menores y que, según el caso, se aplica hasta los 21 años de edad del acusado. Además, la fiscalía expresó su convencimiento de que con su trabajo de oficina, Furchner contribuyó a garantizar el funcionamiento del campo y que con su labor voluntariosa constituyó un importante apoyo para el comandante del campo y sus ayudantes.
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MAO
