Ya se confirmó que el cuerpo del bebé hallado en un contenedor de basura del Cereso de Puebla corresponde al de un menor que había sido sepultado en el panteón San Nicolás Tolentino, ubicado en la alcaldía Iztapalapa de la CDMX. Así lo dio a conocer la activista Saskia Niño de Rivera y también fue confirmado por la Fiscalía General de Justicia capitalina.
Saskia Niño de Rivera, directora de la organización Inserta A.C., detalló además que los padres del bebé fallecido fueron trasladados a Puebla para hacer el reconocimiento del cuerpo y los posteriores trámites que son indispensables para que les sea devuelto. Según la activista, las autoridades prohibieron a los deudos que hicieran declaraciones, a fin de no entorpecer las investigaciones.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México informó a través de sus redes sociales que ya investiga la denuncia sobre posible exhumación de recién nacido enterrado en el panteón de Iztapalapa, luego de que el administrador señalara irregularidades.
De acuerdo con el informe, una mujer se presentó al cementerio San Nicolás Tolentino tras enterarse de las noticias, así que pidió que se excavara en el sitio donde había sepultado a su hijo días antes. Luego de atender la solicitud, comprobaron que el cuerpo ya no estaba. El administrador del panteón y la mujer procedieron a denunciar el caso ante las autoridades.
Debido a ello, personal ministerial de la Fiscalía de Investigación Territorial en Iztapalapa, adscrito a la Coordinación General de Investigación Territorial, integró la carpeta de investigación. Posteriormente se solicitó el apoyo de la Policía de Investigación y la Coordinación General de Investigación Forense con el fin de llevar a cabo las diligencias periciales.
El pequeño se llamaba Tadeo y había nacido el 4 de octubre de 2021. Debido a problemas intestinales falleció el 5 de enero de este año y un día después fue sepultado en el panteón de Iztapalapa.
Posteriormente, de acuerdo con la narrativa cronológica, su cuerpo fue exhumado de manera clandestina y utilizado para introducir drogas al interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Miguel, en Puebla. Los restos del pequeño fueron encontrados en un contenedor de basura el día 10 de enero, aunque el caso vio la luz pública hasta esta semana.
El pequeño cuerpo presentaba una herida en el abdomen, presuntamente provocada por una cirugía, aunque también se sospecha que pueda haber sido realizada para llenarlo de droga y pasar los controles al interior del Cereso. “El por qué, de qué manera o quién fue, todavía no lo sabemos. También desconocemos si la incisión en el cuerpo fue para meter drogas o por una cuestión médica, porque parece que están ocultando la información”, señaló la activista Saskia Niño de Rivera.
Te puede interesar: Visita la CDH penal poblano, por caso de bebé muerto
De hecho fue Saskia la que puso el dedo en la llaga al señalar que “Ya sabemos que se robaron de la CDMX al bebé encontrado en el penal de Puebla. Es importante que Ernestina Godoy informe cómo se pudieron haber robado un bebé para que acabara en un basurero”.
