La noche del 18 de enero de 2019, sucedió la peor tragedia en la historia del Estado de Hidalgo, al menos así la calificó el entonces gobernador de la entidad, Omar Fayad Meneses, quien visitó la zona y ordenó brindar atención médica a los sobrevivientes y apoyar con los gastos funerarios a los deudos de los fallecidos.
Se trata de la explosión en el ducto Tuxpan- Tula, a la altura del kilómetro 226, el cual se ubica entre los límites de Tlaxcoapan y Tlahuelilpan, esto durante el primer año de administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, suceso en el que 137 personas perdieron la vida.
Mientras tanto el mandatario federal mandó apoyara los deudos de los difuntos y encargó dar prioridad a los huérfanos, madres solteras y adultos mayor es que habían perdido a sus padres, maridos o cabezas de familia.
Sobre las víctimas y los sobrevivientes
69 personas fallecieron en la zona cero, horas y días después de los hechos 68 personas más ya no presentaban signos vitales. Mientras tanto, 35 cuerpos fueron identificados durante tres meses posteriores.
Aunque, es importante mencionar que, de acuerdo con los afectados, las instrucciones de López Obrador fueron atendidas durante los seis meses posteriores al evento, sin embargo, al tercer y el cuarto aniversario de la tragedia dejaron de recibir los apoyos.
Por ello, puntualizaron los diversos habitantes afectados y sin ayuda del gobierno como lo son los menores sin becas escolares, sobrevivientes de la situación sin la debida atención médica, así como viuda sin apoyo económico ni oportunidades de trabajo.
En febrero de 2019 se instó a construir un memorial en la zona para recordar a los difuntos. De esta manera, en el primer aniversario se anunció el inicio de su edificación. Sin embargo, el proyecto fue recientemente cancelado.
Operativo por robo de combustible
Ante los hechos y las consecuencias de la atroz explosión, las autoridades se han visto en la necesidad de realizar operativos como lo fue este jueves, donde personal del Ejército mexicano, la Guardia Nacional (GN) y la Policía estatal llevaron a cabo una operación en la comunidad de Bomintzhá, en Tula, con el objetivo de erradicar el robo de combustible.
De acuerdo con los reportes, los elementos de las fuerzas mexicanas aseguraron un terreno y varias unidades en diversos puntos de la localidad, además de un número indeterminado de bidones para rellenar de hidrocarburo, con capacidad de mil litros, de los cuales algunos se encontraban llenos y otros vacíos.
Por su parte, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) quien encabezó el mega operativo mencionó que su objetivo es para repelar cualquier ataque de vecinos.
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