La icónica banda mexicana ofreció un inolvidable espectáculo como parte de su gira “Hasta Siempre”.
El pasado 20 de diciembre, Los Temerarios llenaron el Estadio GNP en su penúltimo concierto de la gira “Hasta Siempre”, un emotivo adiós que marca el cierre de una carrera de 47 años. Encabezados por los hermanos Gustavo y Adolfo Ángel, la velada fue un tributo a sus mayores éxitos y a las generaciones que han seguido su música a lo largo de casi cinco décadas. El concierto comenzó puntualmente a las 21:30 horas, con “Enamorado de Ti” abriendo una noche que se extendería por tres horas.
El carisma y agradecimiento de los hermanos no pasaron desapercibidos. Gustavo dio la bienvenida al público con su característico sentido del humor: “Hoy vamos a cantar esas canciones con las que se enamoraron, se casaron y tienen hijos, nietos y hasta bisnietos”. Por su parte, Adolfo expresó su gratitud: “47 años de estar aquí, y ustedes apoyándonos con todo su corazón. Esta noche les regalaremos tres horas llenas de esas canciones que se han hecho grandes gracias a ustedes”.
El repertorio incluyó temas como “Tu Última Canción”, “Eres Un Sueño”, “Dímelo” y “Si Tú Te Vas”, transportando a los asistentes a distintas épocas de su carrera. Uno de los momentos más emotivos fue cuando Gustavo dedicó “Luz de Luna” a su esposa e hijos, mientras que “Te Hice Mal” destacó por un impactante espectáculo de luces que envolvió al público en una atmósfera íntima y conmovedora.
La conexión con los fans fue constante durante toda la noche. Adolfo expresó: “Gracias por estar aquí tantas generaciones. Qué bonito revivir esto”, mientras que temas como “Ven Porque Te Necesito” y “Acepta Mi Error”continuaron elevando la emoción. El cierre fue espectacular con clásicos como “Te Quiero”, “Mi Vida Eres Tú” y “La Mujer de los Dos”, concluyendo un setlist de 34 canciones que resumió su extensa trayectoria.
El espectáculo no solo brilló por su música, sino también por detalles como las pulseras luminosas que iluminaban el recinto y un dron que capturó la energía del público desde el aire. Con este penúltimo concierto, Los Temerarios no solo celebraron su legado, sino que dejaron una marca imborrable en el corazón de sus seguidores, preparando el terreno para un adiós definitivo lleno de emoción y gratitud.
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