La agrupación no se guardó nada para celebrar sus 30 años de trayectoria artística
¡La espera por fin terminó! Después de dos años y medio de retraso, la agrupación OV7 se pudo reunir en el Auditorio Nacional, y cautivar a sus fans que se dieron cita para cantar todos sus éxitos cosechados a lo largo de estas tres décadas. Ari, Kalimba, Mariana, Óscar, Lidia, Mbalia y Érika, dieron todo en el escenario, donde también se hizo presente la nostalgia, ya que son considerados una de los grupos de Pop más importantes de México.
Fue cerca de las 21:00 horas, que OV7 hizo acto de presencia y arrancó con «Más que amor”, seguido de “Love colada” y “Tus besos”, los integrantes aparecieron con un vestuario en color negro y looks extravagantes, resaltando el de Óscar, quien usó una falda, y el de Mariana, quién llevaba un conjunto del que le salía una larga “cola” de tule, la cual le hizo una mala jugada porque en el segundo tema se resbaló, aunque de inmediato se levantó, con ayuda de Erika y siguió cantando.
La velada pintaba de maravilla, y los asistentes no dejaban de corear las canciones. Así después de un breve saludo al público, Óscar pidió a los fans hacer un viaje al pasado, y recordar sus primeros éxitos musicales, esa época donde ellos todavía eran unos niños y niñas.
“No puedo creer que este momento esté pasando. Lo había soñado durante dos años y medio, y a veces se veía lejos, pero hoy gracias a ustedes, es realidad. Gracias por tener un boleto y no regresarlo, por tener la esperanza para esto”, expresó.
El concierto prosiguió con “Shake Shake”, “Magia”, “No me digas nada” y “Caleidoscopio”, ahora con todos los cantantes vestidos de blancos; después bajaron las revoluciones del show con una selección de sus temas más tranquilos, entre ellos “Desintoxicada” y “Somos un mundo”, los cuales permitieron que el público, que desde la primera canción se puso de pie, regresará a sus asientos.
Para esta gran fiesta, el grupo no se guardó nada y continuaron impactando con grandes coreografías y consintiendo a la gente que ha estado con ellos a lo largo de estos años; así siguieron las melodías de “No es obsesión”, dónde las miles de almas presentes las entonaron alegres. OV7 regresó, ahora luciendo distintos tonos en sus prendas para continuar el baile con “Que buen reventón”, “Aum aum” y “El juego del amor”, por citar algunas. Cada uno de los miembros demostró la condición en la que aún se mantienen, al subir y bajar de las tres tarimas qué había en el escenario, y recorriendo el lugar bailando y saltando, incluso “manejando” coches de cartón.
Después de tanta energía, dieron paso al repertorio tranquilo que tiene la banda, y fue así que canciones como “Como eres” y “Confieso”, arroparon a los fanáticos; asimismo, Kalimba contó lo mucho que ama a su hermana Mbalia, mientras que Lidia celebró la presencia de sus padres en el recinto y Óscar, entre lágrimas, de nuevo, agradeció a todos por el apoyo que el dan al grupo. Estando sola en el entarimado, Mariana invitó a sus hijos a subir para cantar “Te necesito” y tras la primera estrofa, salieron sus compañeros con sus pequeños, lo que conmovió al público.
Por otra parte, cuando se avecinaba el fin del show, OV7 echó toda la carne al asador, y sus canciones más emblemáticas y conocidas aparecieron en sus primas entonaciones, “Mírame a los ojos”, “No es obsesión”, “Un pie tras otro pie”, “Shabadaba” y “Enloquéceme”. Terminaron por cerrar la noche, marcando una etapa más en la agrupación.
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