La hermosa actriz Rosita Quintana, falleció la madrugada de hoy lunes en la ciudad de México debido a varias complicaciones de salud, el mes pasado sus médicos detectaron un tumor en la tiroides, motivo por el cual fue intervenida, y esperaban su recuperación, su familia asegura que siempre gozó de una memoria sorprendente, pues aún convaleciente se acordaba de aquellas canciones que la acompañaron en el cine.
Los restos de la actriz podrían ser depositados en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México donde descansa su difunto esposo Sergio Kogan, quien era representante de los estudios Paramaunt Pictures, reveló su nieta Nicole Kogan.
Trinidad Rosa Quintana Muñoz nació en Buenos Aires Argentina en 1925, su educación fue estricta y recatada en un colegio de monjas, fue su abuela la que la inició en el mundo de la música específicamente en el tango.
A los 15 años la hermosa adolescente empezó a cantar con la Orquesta de los hermanos Caro, donde llamó la atención del compositor Rodolfo Sciamarella, quien decidió llevarla a los escenarios de un casino y fue ahí donde conoció a la estrella del cine mexicano Jorge Negrete, quien la ayudó a trabajar en la industria de este país.
Fue así que en 1947 Rosita Quintana debutó en México primero como cantante en centro de espectáculos El Patio, y después en cine con La Santa de Barrio, recibiendo poca atención, fue hasta su participación con Germán Valdés Tintán en Calabacitas Tiernas, Soy Charro de Levita, y No me defiendas compadre, que logra el éxito que estaba buscando.
Sus trabajos en el cine estuvieron a lado de varias figuras de respeto en la industria, como Pedro Infante, Joaquín Pardavé, Luis Aguilar, Arturo de Córdoba, Andrea Palma y Ramón Gay.
Descanse en Paz, Rosita Quintana.
