Tanto la elección de vestuario de Kim Kardashian para la Met Gala, como los métodos para entrar en él generaron polémica.
Kim Kardashian con el vestido de Marilyn Monroe
Kim Kardashian se presentó en la Met Gala 2022 con un vestuario que conmocionó al mundo de la moda el pasado 2 de mayo.
Ni Versace ni Valentino; Kim K. apostó por el mismo vestido que Marilyn Monroe usó cuando le cantó al presidente John F. Kennedy «Happy Birthday» en 1962.
A mediados de mayo, el Consejo Internacional de Museos prohibió volver a ofrecer piezas históricas a celebridades que lo solicitaran.
Kim Kardashian admitió que perdió 16 libras en solo 3 semanas para poder entrar en el vestido de Marilyn, lo que creo un gran debate en redes sociales.
Para lograr su cometido, usó un traje de sauna dos veces al día, corrió en la caminadora y eliminó de su dieta todas las azúcares y carbohidratos.
“No me morí de hambre, pero fui estricta (con su alimentación)”, añadió.
Sobre las críticas
En la entrevista que le hizo el New York Times a la fundadora de Skims, declaró que estaría dispuesta a comer popó “si me dijeran que me haría lucir más joven”.
Sobre las críticas respecto a haber perdido peso para usar el vestido de Marilyn Monroe, se defendió diciendo que no hizo nada «insalubre» y se trató de un compromiso sumamente importante.
“Para mí era como ‘Ok, Christian Bale puede hacerlo para un papel en una película y está bien’. Incluso Renée Zellweger ganó peso para un papel. Es lo mismo, no es como que estuviera diciendo ‘oigan todos, ¿por qué no van y pierden este peso en un periodo corto de tiempo?’”
También indicó que de no haber llegado a su meta, «no hubiera ido a la Met y no hubiera importado”.
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MG
