El gobierno de Guatemala exigió hoy que se castigue a los responsables del asesinato e incineración de 19 personas en Tamaulipas, el pasado 22 de enero, entre los que ahora se sabe había migrantes originarios de ese país.
La respuesta del gobierno centroamericano, se da luego de que se detuvieran a 12 integrantes de la policía estatal de Tamaulipas en la participación de la masacre en Camargo.
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A los policías se les acusó de homicidio calificado, abuso de autoridad en desempeño de funciones administrativas y falsedad en informes.
«El gobierno guatemalteco reitera su total compromiso y profundo interés en que este caso se resuelva y está atento a los avances de la investigación en curso, que permita conocer a detalle en qué condiciones se produjeron estos sucesos horrendos y solicita que aplique todo el peso de la ley a los responsables de los sucesos tan lamentables que enlutan a familias guatemaltecas», sostuvo la cancillería del país centroamericano.
El gobierno de Guatemala, encabezado por Alejandro Giammattei, manifestó un posicionamiento tras darse a conocer la investigación contra el grupo de policías mexicanos en los hechos.
Explicó que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala mantiene una comunicación constante tanto con e gobierno de Tamaulipas como con las autoridades federales y agradeció la permanente colaboración de la Secretaría de Relaciones Exteriores para esclarecer el caso.
Se espera que dichos trabajos forenses permitan la identificación pronta y certera de todas las personas fallecidas de origen guatemalteco.
