El esposo de una de las víctimas del feminicida de Atizapán fue clave para la detener a Andrés «N», acusado del asesinato de varias mujeres.
El hombre, quien fue expolicía, entró al domicilio de Andrés «N» y encontró a su esposa descuartizada, lo que permitió la captura del asesino.
De acuerdo a información dada a conocer por Televisa, la pareja de Bruno Ángel vio por última vez a Reyna, su esposa, a las 5 de la mañana del viernes 14 de mayo.
Ella le dijo que iría a comprar mercancía para celulares al Centro de la Ciudad de México y que la acompañaría Andrés «N» también conocido como «El Chino».
Sin embargo, cuando Bruno regresó a su domicilio, Reyna no había regresado y sus hijos estaban solos.
«Cerca de las 11 de la noche llegó a la casa de ‘El Chino’, en la colonia Lomas de San Miguel, le dijo que no había visto a la mujer en todo el día», informó Televisa.
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«Tras denunciar en el Ministerio Público, la ausencia de su esposa, al día siguiente en la noche, Bruno llegó de nuevo a la casa de Andrés».
«Aunque lo encaró, siguió negando todo, por lo que Bruno Ángel se metió a la vivienda y caminó hasta la recámara».
«Notó en el fondo unas cajas de cartón que ocultaban la entrada a un sótano, Bruno descendió, ahí encontró el cuerpo de su esposa desmembrado en cubetas», agregó.
En el momento de la confusión, Andrés «N» trató de escapar, sin embargo, en la calle ya se encontraban policías quienes lo capturaron.
