En los trabajos de limpieza participarán 60 elementos de Probosque, 20 del Ayuntamiento de Toluca y 10 elementos de Protección Civil.
Después de los fuertes vientos que se registraron el pasado viernes 1 de julio en el Seminario Diocesano de Toluca, el inmobiliario sufrió daños estructurales, en áreas verdes, por lo que derivado de una solicitud de apoyo de Maximino Martínez Miranda, Obispo Auxiliar, el Gobierno del Estado de México y la Secretaría del Campo dieron la orden a personal del Probosque, para realizar una valoración de los árboles afectados.
Después de una primera revisión, se concluyo que había 212 árboles derribados, de los cuales 173 corresponden a la especie Ciprés, 15 Acacias, 10 Eucaliptos, seis Pinos, dos Yucas, dos Oyameles, dos de Trueno, uno de Níspero y uno de Capulín.
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Luego de una revisión a fondo, se determinó que aún estaban en riesgo de caerse 134 árboles, por lo que la Probosque dispondrá de personal para que apoye a Protección Civil estatal y municipal en las labores de rehabilitación del bosque.
De esta forma, las autoridades comunicaron que la primera fase consistirá en la limpieza del lugar para liberar el espacio e iniciar con el derribo de los árboles que aún están en riesgo; en una segunda instancia, se valorará reponer con árboles urbanos y frutales adecuados a la zona.
En los trabajos de limpieza participarán 60 elementos de Probosque, 20 del Ayuntamiento de Toluca y 10 elementos de Protección Civil.
Por último, las autoridades de Probosque hicieron un llamado a la población en general para reportar ante Protección Civil de cada municipio posibles riesgos de caídas de árboles durante esta temporada, con el objetivo de que puedan ser retirados de manera segura antes de que causen afectaciones a viviendas o civiles.
IGGG
