Fotografía: Kanchanara / Unsplash
Una llamada de la directora de un plantel del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP) en San Luis Potosí a la Policía Cibernética de esa entidad, dejó al descubierto una operación clandestina de minado de criptomonedas que se estaba realizando en el área de Informática de la institución educativa.
En tanto los sistemas de cómputo del colegio presentaban un funcionamiento inusual, problemático y recurrente, Patricia Álvarez Escobedo, directora del plantel de Ciudad Valles, decidió llamar a la unidad especializada de la polícia ante la sospecha de que podrían estar experimentando un posible hackeo, si bien lo que descubrieron es que las máquinas estaban siendo utilizadas para minar criptomonedas.
La minería de criptomonedas es un proceso mediante el cual se validan y agrupan una serie de transacciones matemáticas en un red de cómputo para posteriormente añadirlas a un libro contable que en el argot de este ámbito es conocido como Blockchain o cadena de bloques. Si la operación es exitosa, se obtiene una “recompensa” en criptomonedas.
Llevar a cabo una acción de minado no sólo implica operaciones muy complejas y varias computadoras con una capacidad de memoria muy elevada, sino también energía eléctrica de manera permanente pues los equipos deben permanecer encendidos todo el tiempo para tener éxito.
La polícia cibernética halló que varios equipos de cómputo y dos servidores del plantel disponían de software, hardware (en este caso, tarjetas gráficas añadidas) y la configuración requerida para ese fin, así como una billetera electrónica individual donde se acumulaban las ganancias.
“Algunos equipos todavía se encontraban realizando trabajo de minería utilizando en todo momento equipos y recursos (electricidad e Internet) propiedad de la institución educativa CONALEP”, índicó la Policía Cibernética a través de un comunicado.
Como se mencionó líneas arriba, la energía eléctrica es vital para llevar a cabo una operación de minado de criptomonedas, al punto de que puede poner en peligro las instalaciones eléctricas del sitio en donde se esté realiza, sin mencionar los elevados costes que ello implica. En este sentido, la institución deberá realizar un análisis de su consumo de electricidad y ver si este se ha incrementado en tiempos recientes.
Tras ser alertados por la unidad especializada, el área jurídica del plantel presentó la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General del Estado para dar con el paradero de los responsables, que se presume son empleados del colegio, y se impongan las sanciones correspondientes pues se presume se podrían haber generado ganancia millonarias.
La policía no indicó que tipo de criptomoneda o criptomonedas estuvieron involucradas en la operación ilegal. A modo de ejemplo, el Bitcoin, criptodivisa más popular, tiene una cotización de más de 42,000 dólares por unidad, mientras que la segunda en rango, el Ethereum, tiene un precio superior a los 3,000 dólares por unidad.
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