Investing.com – En abril de 2024, el consumo privado en México registró una caída del 0.9% en comparación con marzo, según cifras desestacionalizadas, rompiendo así la tendencia de crecimiento observada en los tres meses anteriores. Este retroceso representa un cambio significativo en la dinámica económica del país, después de un periodo de crecimiento sostenido.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que, por componente, el consumo de bienes y servicios de origen nacional disminuyó un 1.0%, mientras que el consumo de bienes de origen importado cayó un 0.7% respecto al mes anterior.
A pesar de la caída mensual, el consumo privado mostró un incremento anual del 3.4% en abril, aunque este fue su menor aumento desde enero de 2024 y una desaceleración notable respecto al 5.9% registrado en marzo. Dentro de este contexto, el gasto en bienes importados creció un 20.0%, mientras que el consumo de bienes y servicios nacionales descendió un 0.1%, con una baja del 1.6% en bienes y un crecimiento del 2.0% en servicios.
Consumo privado había mostrado una recuperación
El colectivo de economistas “México, ¿cómo vamos?” destacó que, tras las caídas de abril y mayo de 2020 debido a la pandemia, el consumo privado había mostrado una recuperación constante, superando en febrero de 2022 los niveles prepandemia. Sin embargo, el máximo histórico alcanzado en marzo de 2024 no pudo mantenerse, situándose en abril por debajo de ese nivel.
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Por su parte, el Grupo Financiero Base señaló que el consumo de bienes importados se había beneficiado de la apreciación del peso frente al dólar en los primeros meses de 2024. No obstante, la depreciación del peso, iniciada tras los resultados de las elecciones en junio, sugiere que este tipo de consumo podría continuar contrayéndose en los próximos meses.
Conclusión
En abril de 2024, el Indicador Mensual del Consumo Privado (IMCP) presentó una disminución del 0.9% respecto al mes anterior, con variaciones mensuales del -1.0% en bienes y servicios de origen nacional y del -0.7% en bienes de origen importado. Este retroceso plantea desafíos para la economía mexicana, que deberá enfrentar los efectos de una moneda más débil y la desaceleración del consumo privado en el futuro cercano.
Para más detalles, consulte el comunicado oficial del INEGI en sus plataformas digitales.
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