Durante la Reunión Anual de Industriales 2022 de la Concamin, AMRACI y CONAPCI recibieron el premio «Ética y Valores» por su labor y líderazgo para prevenir incendios
La Asociación Mexicana de Rociadores Automáticos Contra Incendios (AMRACI) y el Consejo Nacional de Protección Contra Incendios (CONAPCI) recibieron el premio “Ética y Valores” otorgado en la Reunión Anual de Industriales 2022, que se llevó a cabo en León, Guanajuato, por su iniciativa de la “Campaña Nacional de Prevención Contra Incendios”, que cumplió su octavo aniversario, celebrado entre el 3 y 7 de octubre.
Cabe destacar que a la Reunión Anual de Industriales (RAI) es el evento en el ámbito más importante de México, que reúne a más de mil líderes empresariales y en el que también participan los personajes más representativos de la vida económica, política y social del país, organizada por la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin).
Tras recibir el reconocimiento, el presidente de AMRACI, Juan José Camacho Gómez, destacó la importancia de la prevención de incendios en la industria, los cuales a diferencia de los sismos o huracanes se presentan con mayor frecuencia de lo que parece, ya que anualmente se registran más de 95 mil incendios urbanos y no urbanos, 260 al día, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En ese sentido, Camacho Gómez explicó que los incendios son responsables del 31% de los desastres en México y ocasionan el 26.9% de la totalidad de la mortalidad asociada (humo, gases tóxicos, etc.), adicionalmente tienen gran impacto en la sociedad.
En México, en los últimos 10 años, más de 6 mil personas fallecieron por exposición a fuego no controlado en construcción, por exposición de ignición de material altamente inflamable, explosiones o por contacto con líquidos calientes (bebidas y alimentos), siendo los grupos más vulnerables los más afectados, es decir niños y adultos mayores.
Asimismo, Juan José Camacho habló del impacto social, las severas consecuencias para las víctimas y sus familias, que incluyen el costoso cuidado médico, el desempleo temporal o permanente y las secuelas físicas o mentales, que de acuerdo con la Fundación Michou & Mau equivalen a medio millón de dólares en lo que a atención médica de un pequeño que sufre quemaduras se refiere.
En tanto, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) de 2012, en México 124 mil personas sufrieron quemaduras no fatales al año, y por cada persona que fallece, 220 personas sobreviven, pero quedan con secuelas que afectan:
- Su apariencia física.
- Su estado emocional.
- Su funcionamiento corporal y su conducta ante la sociedad.
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Por otra parte, en materia económica, las instituciones de seguros reportaron pérdidas por incendio de más de 34 mil millones de pesos en los últimos cuatro años.
Adicionalmente, el 80 por ciento de las edificaciones que sufren algún siniestro pierden el 100 por ciento de su patrimonio, lo que interrumpe la continuidad de operaciones, pérdida de empleos y por tanto la competitividad de las industrias.
En la ceremonia de premiación estuvo presente el director de CONAPCI y AMRACI, Víctor Espinola, así como el presidente de Concamin, José Abugaber Andonie.
