Después de una reunión entre funcionarios y con cuatro votos a favor y uno en contra, el Banco de México (Banxico) incrementó la tasa de interés en 25 puntos base, por lo que se ubica en 4.75 por ciento.
Es el tercer movimiento al alza desde junio y de nuevo, ocurrió sin la aprobación de todos los integrantes, pues Gerardo Esquivel se opuso a este incremento, como lo ha hecho anteriormente, sin embargo, no contó con el apoyo de Galia Borja.
Los funcionarios dentro de Banxico coincidieron en que los choques para la inflación son transitorios, no obstante, una preocupación creciente también es que puede ser mucho más duradero de lo supuesto a inicios de año, extendiéndose más allá de 2022.
Desde el banco central se reconoce que las presiones inflacionarias globales y los cuellos de botella en la producción continúan afectando a la inflación general y subyacente durante septiembre y las expectativas de inflación general y subyacente para 2021 volvieron a incrementarse, para los próximos 12 meses y para 2022 también aumentaron, mientras que las de largo plazo se han mantenido estables en niveles superiores a la meta.
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