Ni siquiera por ser un tema tan especial como todos los homenajes y reconocimientos a Diego Armando Maradona, influyeron para que la Real Federación Española de Futbol no aplicara el código de sanciones por lo que a Leonel Messi le ratificaron la tarjeta amarilla y lo multaron por celebrar su gol ante el Osasuna quitándose la playera del Barca y mostrar una del Newell’s Old Boys.
En el encuentro del fin de semana pasado, cuando el Cuadro Culé goleó 4-0 al Osasuna, dentro de la Jornada 10, Lio anotó el último gol del partido y festejó quitándose la camisa y dejando al descubierto una de los leprosos que fue la que utilizó Diego en 1993, en una corta etapa de su carrera con el Newell’s en un amistoso ante el Emelec de Ecuador, partido que Messi presenció siendo un niño.
La Pulga miró al cielo con los brazos levantados, homenajeando al 10 de la Selección de Argentina que había fallecido tres días antes.
Siempre que un jugador se quita la playera, normalmente para celebrar una anotación, automáticamente se hace acreedor a una tarjeta de amonestación y con Messi no se hizo ninguna excepción y el Comité de Competencia de España, señaló que comprende el contexto del festejo, pero que el reglamento se tiene que aplicar sea la situación que sea.
El Comité dijo: “Entiende que no se deduce con evidencia la existencia de un error material manifiesto, único supuesto en el que se procedería dejar sin efecto las consecuencias disciplinarias de la amonestación impuesta en aplicación a los artículos 27 y 130 del Código Disciplinario vigente”.
Por esta razón, la Autoridad Disciplinaria multó con 600 Euros a Leonel Messi y con 180 Euros al Barcelona.
El dinero es ínfimo, la inflexibilidad y carencia de tacto y sentido común es lo que se le puede criticar a la Federación Española.
