El Lille derrotó 1-0 al Paris Saint-Germain con un golazo de Xeka y se proclamó campeón de la Supercopa de Francia, terminando con la racha del conjunto parisino de ocho años consecutivos quedándose con el trofeo.
A pesar de las múltiples bajas que ha sufrido el desde el término de la temporada pasada en que coronaron campeones de la Ligue 1, no solo de jugadores sino también de directivos y de su entrenador, el Lille se mantuvo fiel a su estilo y logró propinarle al PSG su primer fracaso del año en el Bloomfield Stadium de Tel Aviv, Israel.
Desde el pitazo inicial, el equipo de Mauricio Pochettino dominó la posesión del balón, pero se mostró falto de idea la mayor parte del encuentro. A ‘Les Dogues’ no les importó no tener la pelota, pues priorizaron plantarse bien defensivamente para, a partir de ahí, poder atacar con base a latigazos encabezados por Burak Yilmaz, quien exigió a fondo a Keylor Navas en más de una ocasión.
El gol que decantó el campeonato cayó el minuto 45, cerca del final del primer tiempo, cuando el portugués Xeka disparó con potencia desde fuera del área y sacó un riflazo inatajable para el guardameta costarricense.
Con la ventaja a su favor, el Lille se replegó y más se dedicó a contragolpear en la segunda parte, por lo que el PSG se volcó hacia al frente en busca del empate, más por inercia que por buen juego. Los parisinos tuvieron algunas oportunidades de peligro sobre el arco rival, pero no fueron capaces de doblegar la portería defendida por Leo Jardim.
Esta fue la primera vez que el Lille consigue quedarse con la Supercopa de Francia, luego de que perdieran las dos veces anteriores en que disputaron el título, en 1955 y 2011.
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