Con un autogol de Pervis Estupiñán y un tanto más de Sadio Mané, el Liverpool venció sin complicaciones 2-0 al Villarreal y dio un paso importante rumbo a la gran final de la UEFA Champions League.
Anfield fue mucho escenario para un ‘Submarino amarillo’ que, hasta ahora, ha sido el caballo negro de la competición, pero que tendrá una labor más que complicada en el partido de vuelta cuando intente remontar la eliminatoria ante unos ‘Reds’ que lucen muy sólidos.
Los dirigidos por Jürgen Klopp fueron amos y señores del partido de principio a fin. Tal y como se esperaba, el Villarreal se dedicó a defenderse, por lo que los locales manejaron la pelota a placer y aprovecharon el empuje de su gente para acorralar al rival en su propio campo.
El planteamiento de Unai Emery rindió frutos en la primera mitad, ya que por más que los ‘Reds’ lo intentaron, no consiguieron doblegar el arco de Gerónimo Rulli. Sin embargo, los españoles no corrieron con la misma suerte en la parte complementaria, pues los ingleses inclinaron la balanza a su favor en un lapso de menos de cinco minutos.
La pizarra se abrió al 53′ con un autogol de Pervis Estupiñán, quien tuvo la mala fortuna de desviar el balón hacia su propia portería intentando cortar un centro que iba desde la banda izquierda. Posteriormente, de manera casi inmediata, al 55′, Mohamed Salah tomó la esférica al borde del área y metió un pase preciso entre líneas que Sadio Mané definió sin problemas para poner el 2-0.
Al verse en desventaja, los visitantes intentaron atacar más, pero no causaron mayor peligro sobre Alisson Becker. Por su parte, los ‘Reds’ estuvieron muy cerca en repetidas ocasiones de aumentar aún más su ventaja, incluso le anularon una anotación a Andrew Robertson por fuera de juego.
El compromiso de vuelta se llevará a cabo el próximo martes en el Estadio La Cerámica. El Liverpool buscará concluir la obra y avanzar a la final de la Liga de Campeones por primera vez desde el 2019, cuando levantaron la ‘Orejona’ en el Wanda Metropolitano tras vencer al Tottenham. Por su parte, el Villarreal apelará a un milagro delante de sus aficionados para mantener viva la ilusión de seguir adelante en el torneo.
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