Con un programa dedicado al desaparecido Jacobo Grinberg, la bailarina Érika Méndez presenta su arte basado en la física cuántica
La física cuántica ha inspirado a la bailarina y coreógrafa Érika Méndez para crear propuestas escénicas que muestran el vínculo entre la ciencia y los seres humanos, y cómo ciertas fórmulas del universo pueden transformar su existencia. Parte de estas creaciones conforman el programa La Matriz, que su compañía Lagú Danza interpretará en el Palacio de Bellas Artes el jueves 4 de agosto a las 20:00 horas.
Para esta función, la directora de Lagú Danza pensó en La Matriz, una trilogía que se deriva de la investigación de Érika Méndez a lo largo de cuatro años sobre física cuántica. Está compuesta por las piezas La Matriz (Teoría Sintérgica), Teorías duplicadas y Alina (Memoria del multiverso), las cuales han sido reconocidas en el certamen Premio Nacional de Danza Guillermo Arriaga.
Las tres obras presentadas de manera independiente han tenido gran aceptación del público, expresó la coreógrafa. “En palabras de los propios espectadores, me hacen saber que les cambió su vida en algo; además, son propuestas maduras y con el ímpetu de compartir algo que ha cambiado mi vida en todos los niveles, que es la física cuántica”.
Érika Méndez detalló que dicho programa está dedicado a los seres humanos que han intentado explicar desde la ciencia cómo nuestra mente puede construir la realidad que compartimos todos. Asimismo, es un homenaje a Jacobo Grinberg, científico mexicano fundador del área para el estudio de la conciencia en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a 28 años de su desaparición, y quien hizo grandes descubrimientos acerca del potencial de la mente y del pensamiento.
Al abundar sobre su trabajo inspirado en la ciencia, comentó que es resultado de sus estudios en el área físico-matemático del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y de la manera cómo la física cuántica le salvó la vida en un accidente automovilístico: “Así nada más, di un salto cuántico para salir del carro sin un rasguño y el automóvil fue pérdida total”.
Nominada a Mejor Coreografía en los premios Los Metro (2021), Érika Méndez dijo que esta función llevará al público a vivir y a ser parte de la magia que se crea en el escenario, sin efectos grandilocuentes, solo con el surrealismo que puede crear la danza y todos los elementos que la sostienen, cobijada por la iluminación de Sandra Ureña y Aurelio Palomino.
Finalmente, expresó que bailar en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes es un reconocimiento al trabajo arduo y amoroso de todos los integrantes de la compañía a lo largo de muchos años.
