Con motivo del natalicio del fotógrafo, se ofreció una conferencia donde se dieron a conocer detalles de la vida y obra del autor
El Museo Archivo de la Fotografía presentó la tarde del martes 22 de agosto, la conferencia El pata de perro, Héctor García, impartida por la Dra. Raquel Navarro Castillo, investigadora, historiadora y etnohistoriadora de la Escuela Nacional de Antropología e Historia del INAH. La docente conversó sobre la importancia de reconocer la obra del fotógrafo, a quien calificó como la bisagra entre el pasado y el presente del México moderno, pues el fotoreportero se encargó de crear uno de los archivos más vastos e importantes del siglo XX, «ya que no solo documentó importantes movimientos sociales y vida cotidiana, sino que fue uno de los pioneros que impulsaron el lenguaje visual, como una forma de arte y comunicación, revolucionando el mundo del fotoperiodismo».
En entrevista con El Capitalino, la Dra. Raquel Navarro comentó cuál es la importancia de acercarse y conocer el trabajo del fotógrafo mexicano Héctor García, «el Archivo de García nos funciona como una herramienta para historiar una temporalidad de México, más específicamente, la mitad del siglo XX, la cual es vital para entender el desarrollo del México moderno, ya que el periodista usó la fotografía como una herramienta para documentar y hacer historia, para darle rostro a periodos históricos y movimientos sociales, que antes la prensa mexicana evitaba hacer.»
Navarro, señaló que a través de nueve exposiciones que se están llevando a cabo en distintos recintos culturales en honor al centenario del nacimiento del fotógrafo, se permitirá a nuevos públicos descubrir y encontrarse con la obra del maestro García, pues en dichas exposiciones las personas podrán encontrarse con los rostros y personas con las que el autor estaba familiarizado, «en sus fotografías podrán encontrar a la gente del barrio, así como a las personas más vulnerables; todos retratados de una forma muy especial con respeto y humanidad, contrario a la gente más privilegiada; a quienes el autor había veces que los retrataba de forma burlona y cómica».
Asimismo, la historiadora menciona que la forma de retratar de Héctor García era muy cercana, ya que era imposible no verlo, pues era un hombre muy alto y llamativo; por tal razón él tenia que estar familiarizado con los sujetos que retrataba, pues de otra manera los haría sentir cohibidos y evasivos, «en su obra no se nota agresión, o invasión al otro, es más un retrato que rinde homenaje a las personas de a pie, así como situaciones cotidianas».
Navarro señaló que las nuevas generaciones de fotógrafos deberían conocer y familiarizarse con el trabajo de García,
«Hector es la bisagra entre los antiguos fotógrafos que utilizaban la fotografía como oficio y los que lo convirtieron en un objeto de arte, él pasaría a ser el maestro de un enfoque mucho más estudiado y teorizado, dando paso al nuevo fotoperiodismo mexicano donde podemos encontrar a otros autores como Elsa Medina, Marco Antonio Cruz, por mencionar algunos, que vuelven a inspirarse en la estética de Héctor García y Nacho López , sin perder el enfoque principal de la fotografía, el cual era informar». La investigadora concluyó invitando al público y autores a mirar con mayor sensibilidad, reconociendo el trabajo de grandes autores como García, que además de informar logran cautivar con su obra.
La obra de Héctor García es importante porque captura la riqueza cultural de México a lo largo de décadas, preservando momentos históricos y tradiciones culturales únicas a través de sus fotografías. Sus imágenes se centran en la vida cotidiana de la gente común, lo que proporciona una visión auténtica y conmovedora de la vida en México en el Siglo XX, su trabajo ha inspirado a fotógrafos jóvenes y ha contribuido al desarrollo de la fotografía documental en México.
