Los habitantes de las comunidades de Paso Hondo, El Fraile, Terrenos y el Porvenir se negaron a ceder el agua del rio alegando que el recurso les pertenece
Los habitantes de la ciudad de Allende en Nuevo León se niegan a ceder el agua del Río Ramos que consideran suya.
Dieciocho piezas de tubería contemplados en los trabajos de extracción de agua del Río Ramos como estrategia del Gobierno estatal para sobrellevar la sequía en Monterrey fueron quedamos por vecinos de la ciudad de Allende debido a que el líquido vital planeado a trasvasar proviene del cuerpo acuífero número uno en abastecer su región.
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Los pobladores actuaron en respuesta al anuncio emitido por Agua y Drenaje de Monterrey sobre la extracción del líquido en beneficio de la población de Monterey.
De acuerdo con Protección Civil (PC) de la entidad, el grupo de habitantes organizados incendiaron el material de obra durante la noche del sábado 16 de julio.
El racionamiento del recurso en la entidad se ha tornado en estratégico a medida que la falta de agua se agudiza.
De acuerdo con testimonios, los pobladores de la región amenazaron a los trabajadores de las obras con no continuar con los trabajos de instalación, motivo por el cual, ante una respuesta negativa, decidieron incendiar los 18 tubos de plástico para drenaje.
Además del incendio los vecinos de la región organizaron una protesta sobre la Carretera Nacional a modo de exigir el alto al proyecto de extracción de agua en el río.
En ese sentido, los inconformes detuvieron el flujo de la carretera por más de dos horas hasta que la alcaldesa de la región, Patricia Salazar, entabló un diálogo con los manifestantes, mismo que acordaron reunirse con autoridades de Agua y Drenaje de Monterrey para resolver y consensuar un acuerdo.
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JOVC
