El Poder Judicial del Estado de México emitió un comunicado asegurando que el caso de Roxana «N», condenada por homicidio con punibilidad atenuada por exceso de legítima defensa, fue valorado con perspectiva de género integral, considerando la condición de vulnerabilidad de la imputada como mujer e indígena.
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La institución destacó que Roxana se encuentra en libertad y que tanto la defensa como la acusación tienen la opción de apelar la sentencia, lo que permitirá que en segunda instancia magistradas y magistrados revisen, modifiquen o reviertan la resolución emitida por la jueza Mónica Osorio en los Juzgados de Neza-Bordo.
El comunicado del Poder Judicial mexiquense proporciona detalles sobre la acusación y la mecánica de los hechos, donde se estableció el exceso en la legítima defensa debido a que, según las pruebas presentadas, Roxana «N» dejó inconsciente a Sinaí «N» con un golpe en la cabeza y posteriormente lo asfixió por estrangulamiento.
La institución argumentó que el golpe inicial era suficiente para contener la agresión física, y que fue en ese momento cuando se detuvo el ataque. Además, señaló que Roxana permaneció con el cadáver durante al menos 20 horas y se confirmó que causó lesiones post mortem, incluyendo cinco heridas de entre cuatro y 32 centímetros.
La jueza consideró que la culpabilidad de Roxana «N» se agravó al intentar mutilar el cuerpo y colocarlo en una bolsa de plástico antes de salir a la calle, según destaca el comunicado, que solicita respeto hacia la jueza que resolvió el caso «con base en las pruebas presentadas por las partes».
El 8 de mayo de 2021, Roxana accedió a que Sinaí la acompañara a su vivienda después de terminar su jornada laboral. Sin embargo, cuando la joven de 21 años decidió que era hora de irse a casa, el hombre insistió en quedarse a dormir argumentando que vivía lejos y era tarde para regresar.
Según una carta redactada por Roxana mientras se encontraba en prisión, el hombre la golpeó y violó. Después de que la joven golpeara al presunto agresor en la nariz y éste comenzara a sangrar, la amenazó de muerte. Roxana intentó deshacerse del cuerpo metiéndolo en un costal, pero fue detenida por la policía municipal al descubrir el cadáver.
