En el primer debate organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE), la candidata a la Presidencia de la República por la coalición PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez Ruiz, hizo una declaración audaz: México elegirá a su primera presidenta mujer con raíces indígenas.
En un acto cargado de emotividad y compromiso, Gálvez destacó su visión para el país, prometiendo construir una nación próspera donde el salir de la pobreza sea un derecho universal, no un privilegio reservado para unos pocos. Acompañada de personas que han sufrido tragedias como el colapso del Colegio Rébsamen y la caída de la Línea 12 del Metro, la candidata enfatizó su compromiso con la justicia social y el bienestar de todos los mexicanos.
«Quiero ser la primera Presidenta de México para construir un país próspero, donde salir adelante sea un derecho, no un privilegio. En mí vas a tener una Presidenta con carácter y capacidad, que siempre te va a decir la verdad. Una mujer protectora, que nunca se vence, ante nada y ante nadie. Quiero que hagamos un México próspero, entre todos, distinto y de verdad», declaró Gálvez.
Durante su intervención, la candidata de Fuerza y Corazón por México mostró su firmeza al abrazar la bandera nacional, prometiendo defenderla de la corrupción y la delincuencia. «La bandera de México nos cobijará a todos. Nos cobijará en unidad, nos cobijará en paz. Voy a defender a México por ti y por tus hijos», afirmó.
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En cuanto a las propuestas, Gálvez presentó un plan integral que abarca temas como salud, educación, combate a la corrupción, apoyo a las víctimas de la violencia y defensa de los migrantes. Destacó la creación de la tarjeta Mi Salud, para garantizar el acceso a medicamentos y atención médica especializada, así como el fortalecimiento de instituciones como el Instituto Nacional de Transparencia y la Auditoría Superior de la Federación para combatir la corrupción y la impunidad.
