La noche del 31 del sábado agosto, las calles del Centro Histórico de la Ciudad de México se convertirán en el escenario de un paseo aterrador que revive algunas de las leyendas más macabras de la época colonial. En un recorrido nocturno lleno de misterio y tradición, los asistentes serán guiados por historiadores y narradores que les transportarán a un tiempo donde las historias de fantasmas, espectros y tragedias resonaban en cada esquina.
El evento, organizado por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, atraerá a cientos de personas interesadas en descubrir los secretos ocultos detrás de las fachadas de las antiguas casonas y edificios coloniales.
A medida que la luna iluminará las calles empedradas, los participantes se sumergirán en relatos que han perdurado por generaciones, como la historia de La Llorona, el espectro de una madre en busca de sus hijos, o la leyenda de La Casa de la Moctezuma, donde se dice que aún se escuchan los lamentos de antiguos prisioneros.
Uno de los momentos más escalofriantes del paseo será la parada frente a la Iglesia de San Francisco, donde se cuenta que el alma en pena de un fraile recorre el atrio cada noche, en busca de redención por un pecado no confesado. Los narradores, vestidos con trajes de época, harán que los asistentes puedan sentir un escalofrío recorrer sus venas mientras el fraile aparece y desaparece entre las sombras.
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Además de las leyendas, el paseo también ofrecerá una visión sobre la vida cotidiana en la Ciudad de México durante la Colonia, revelando cómo la muerte y lo sobrenatural eran parte integral de la cultura popular de aquel entonces. Las historias de duendes, brujas y apariciones no solo asustaban, sino que también reflejaban las creencias y miedos de la sociedad colonial.
El evento concluirá en la Plaza de Santo Domingo, donde los asistentes, con el corazón acelerado y la imaginación desbordada, compartirán sus impresiones y discutirán sobre cuáles de las leyendas les habían impactado más. Algunos comentaron que, a pesar de lo inquietante de las historias, el recorrido les permitió conectarse con una parte fascinante y oscura de la historia de la ciudad.
Este paseo por las leyendas macabras del Centro Histórico no solo es un recordatorio de la rica herencia cultural de la Ciudad de México, sino también una invitación a explorar y preservar las tradiciones que, generación tras generación, continúan fascinando e inspirando a quienes se atreven a escuchar.