Al cumplirse diez años de la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no existe impunidad en el caso y que “a nadie se le protegió”. Durante su conferencia matutina, el mandatario manifestó su solidaridad con las familias de los jóvenes y refrendó que el Gobierno de México mantiene los esfuerzos de búsqueda y justicia para esclarecer los hechos ocurridos el 26 de septiembre de 2014, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
“Que les quede muy claro, se los digo de manera sincera, con todos mis sentimientos: no hay impunidad para nadie. Hicimos todo por encontrar a los jóvenes y a nadie se le protegió. Queríamos saber todo, se complicaron las cosas, están enredadas por intereses, pero la verdad siempre se abre paso y la justicia tarda, pero llega”, subrayó López Obrador.
El presidente afirmó que, aunque la situación es compleja, el compromiso de su administración ha sido constante y que la próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dará continuidad a este objetivo, reafirmando así el compromiso del gobierno federal con la verdad y la justicia en el caso de Ayotzinapa.
“Hay que seguir adelante. No quiero dejar de expresar mi tristeza y manifestar mi solidaridad con las madres y padres de los jóvenes porque hoy se cumplen diez años de la desaparición. Ellos van a manifestarse, están en todo su derecho de hacerlo; hay que comprender lo que significa la pérdida de un ser humano, más cuando se trata de un hijo”, señaló el mandatario.
En el contexto de esta conmemoración, López Obrador reiteró que el derecho a la libre manifestación está garantizado, y aseguró que el gobierno se ha enfocado en resguardar edificios emblemáticos como Palacio Nacional y la Catedral Metropolitana para prevenir daños al patrimonio histórico, sin recurrir a la represión.
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“Sin represión, porque en nuestro gobierno no ha habido ni habrá represión. Vamos a procurar que haya una manifestación pacífica en bien de todos”, concluyó el presidente, reafirmando su postura de respeto a las expresiones de protesta y su deseo de que el proceso de búsqueda y justicia continúe avanzando con transparencia y apego a los derechos humanos.
La desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa es uno de los eventos más dolorosos y emblemáticos en la historia reciente de México, y a diez años de los hechos, las familias de los estudiantes siguen exigiendo verdad y justicia, mientras el país entero acompaña su demanda de saber qué ocurrió realmente con sus seres queridos.