México se encuentra entre los cinco países con las tasas más altas de asesinatos, según el Informe global sobre homicidios 2023 publicado por la Organización de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
Con una tasa de homicidios de 28.2 por cada 100.000 habitantes, México se ubica por debajo de países como Honduras, Jamaica, Myanmar y Trinidad y Tobago, pero sus cifras son preocupantes.
Entre los años 2015 y 2021, el crimen organizado fue responsable de aproximadamente 700.000 asesinatos en todo el mundo, con la mayoría de estos ocurriendo en el continente americano.
El informe destaca una «impunidad crónica» en los delitos de alto impacto en la región, lo que ha contribuido a esta escalada de violencia.
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El informe también revela que el año 2021 fue el más letal en cuanto a violencia homicida a nivel mundial, con un estimado de 458.000 muertes intencionales. América concentró la mayor parte de estas muertes, con una tasa de 15 por cada 100.000 habitantes.
Este aumento se atribuye a las repercusiones económicas de la pandemia de Covid-19, así como al aumento de la violencia sociopolítica y relacionada con pandillas.
Las causas subyacentes de esta violencia incluyen la competencia entre grupos criminales por el control de los mercados ilegales, la debilidad del Estado de derecho, la desigualdad social, el desempleo juvenil y la producción récord de drogas y armas de fuego.
En particular, el aumento de la producción de cocaína y la expansión de las organizaciones criminales transnacionales han contribuido a tasas más altas de muertes intencionales.
El informe destaca un caso preocupante en Ecuador, que experimentó un aumento del 470% en las tasas de homicidios entre 2016 y 2022, debido a la intensificación de la competencia violenta entre bandas rivales de narcotraficantes, como el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa.
Un factor importante que influye en la violencia letal en América Latina y el Caribe es el acceso y uso indebido de armas de fuego.
La región registra la proporción más alta de homicidios relacionados con armas de fuego a nivel mundial, con tasas específicas de 9.3, 16.9 y 12.7 por cada 100.000 habitantes en el Caribe, América Central y Sudamérica, respectivamente.
Además, el informe revela que la impunidad en los casos de homicidio es un problema grave en las Américas, con un bajo número de condenas en comparación con otras regiones. En algunos países de la zona, se sentencia a menos de dos personas por cada diez víctimas de homicidio.
En resumen, el informe de la UNODC pone de relieve la grave situación de violencia homicida en México y en la región de América, destacando las complejas causas subyacentes, la relación con el crimen organizado y la importancia de abordar la impunidad y el acceso a armas. de fuego para combatir este problema.
