Durante la conferencia mañanera de este lunes, la canciller mexicana Alicia Bárcena anunció que México no tomará medidas contra la representación diplomática de Ecuador en el país, a pesar de la reciente ruptura de relaciones bilaterales.
Esta decisión sigue a la controvertida irrupción de fuerzas del orden ecuatorianas en la embajada mexicana en Quito.
El incidente se desencadenó cuando policías y soldados ecuatorianos ingresaron por la fuerza a la sede diplomática mexicana para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas, quien había sido condenado por corrupción. México había concedido asilo político a Glas poco antes, después de que este se refugiara durante meses en la embajada.
En una rueda de prensa, Bárcena afirmó: «Nosotros no vamos a tomar ninguna medida de esta naturaleza», en respuesta a las preguntas sobre el estatus del jefe de la legación diplomática ecuatoriana en la capital mexicana, el encargado de negocios Luis Gustavo Espinosa, tras el incidente.
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Además, la Secretaría de Gobernación de México hizo un llamado a la calma, instando a que cualquier manifestación sea pacífica. Bárcena reiteró este mensaje, destacando la importancia de mantener la tranquilidad en medio de la situación.
Durante la misma conferencia, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su agradecimiento a Nicaragua por romper relaciones con Ecuador en solidaridad con México. También reconoció las muestras de apoyo expresadas por otros gobiernos latinoamericanos, así como por Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea.
El incidente ha generado tensiones diplomáticas entre Ecuador y México, pero hasta el momento, México ha optado por no tomar represalias contra la representación diplomática ecuatoriana en su territorio, priorizando la búsqueda de soluciones pacíficas y diplomáticas para resolver la situación.
