Comerciante en el Mercado 44, narra que estos juguetes provienen principalmente del Estado de México, Tlaxcala, Puebla, Guanajuato, Hidalgo y Michoacán.
En el mercado 44, en el corazón de Xochimilco, aún persisten alrededor de cuatro locales que ofertan juguetes tradicionales, es decir, elaborados con madera, alambre y yeso, principalmente.
A pocos días de la llegada de Santa Claus, aún hay niños que husmean entre estos puestos de juguetes para elegir “que le van a pedir a Santa”.
Sin embargo, muchos piensan que en esta vida moderna los juguetes tradicionales han sido reemplazados por electrónicos; pero aún hay niños que prefieren los elaborados por manos de artesanos mexicanos.
Doña Ana María Ledezma García, comerciante en el Mercado 44 desde hace 30 años, narra que estos juguetes provienen principalmente del Estado de México, Tlaxcala, Puebla, Guanajuato, Hidalgo y Michoacán.
Marionetas, baleros, xilófonos, trompos, pizarrones, tambores, guitarras, yoyos, trenes, dominós, pirinolas, matracas y caballitos, hechos de madera son parte de su variada oferta que junto a las alcancías de yeso y las loterías de cartón, pintan de colores su puesto.
Asegura que en comparación con los juguetes modernos, los tradicionales son más baratos, pues hay desde 20 hasta 100 pesos. Además, afirma que desarrollan la imaginación y destreza de los pequeños. Ante esto, por si Los Reyes Magos buscan un regalo auténtico, en el puesto de doña Ana María se venden trajineras a escala, que asegura la locataria, navegan con facilidad en las piletas o tinas que pueden simular los canales del bello Xochimilco.
Finalmente, es importante señalar que el Mercado 44 es considerado de los más antiguos de la Ciudad de México; pues su origen se remonta a la época Virreinal. Actualmente cuenta con más de 500 locales.
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G.Ch.Ch.
